Durante su visita al municipio de Galapa, la gobernadora Elsa Noguera anunció que serán 500 los guardianes de la salud que estarán en municipios y corregimientos evaluando el riesgo en salud de cada una de las personas donde ellos viven, y serán el primer contacto del sistema de salud de los atlanticenses para que ellos puedan alcanzar los servicios.
'Los guardianes de la salud residirán en los municipios, corregimientos y veredas. Serán los ojos y los oídos de la Gobernación y de las alcaldías municipales', dijo la mandataria departamental al enfatizar que ellos visitarán casa a casa, familia por familia, para de esta manera contar con un diagnóstico de las necesidades de la población. 'Cuando la familia tiene una necesidad del sistema de salud llaman a su guardián y a través de la red pública integrada se le brinda su atención'.
Noguera explicó que estos técnicos de la salud serán los que se aseguren de que las familias realmente reciban una atención de primer nivel más de prevención y en la medida que tengan una urgencia también puedan a través del Centro de Regulación de Urgencias y Emergencias, CRUE, tener la disponibilidad, bien sea en un hospital departamental o municipal.
Galapa tendrá 30 guardianes de la salud y el requisito es que estas personas vivan en su municipios, corregimientos o veredas, para que en la eventualidad de que la familia tenga una urgencia pueda contactarlos rápidamente.
Por su parte, la secretaria de Salud del Departamento, Alma Solano, explicó que estarán articulados con los hospitales y la secretarías de salud de cada municipio haciendo vigilancia activa, es decir, identificando casos de fiebre, de dengue, haciendo los bloqueos, acompañando las acciones de las secretaría de Salud municipal y departamental.
'Ese guardián de la salud será el protagonista de nuestro modelo de salud en el departamento', explicó.
Ellos también desempeñarán un papel de apoyo en la educación para la promoción, prevención y control de la salud, pero en ningún caso prestarán servicios médicos.
Serán claves para identificar y apoyar a las personas en el proceso de evaluación y diagnóstico de algunas enfermedades de alto impacto, además acompañarán al paciente que requiera tratamientos largos para así motivarlos a cumplir las indicaciones médicas y ayudarán a generar conductas positivas y cambios ambientales para prevenir enfermedades.