Gestores culturales y gremios de Barranquilla están a la expectativa por el futuro del Teatro Amira de la Rosa, un escenario que fue cerrado al público tras encontrar fisuras y 'graves fallas' estructurales.
Aunque el gerente del Banco de la República (entidad que administra el teatro), Juan José Echavarría, ha manifestado su voluntad de entregar a la ciudad un teatro moderno, con una inversión de $60 mil millones, los gestores siguen preocupados por las demoras en el inicio de las obras.
El gerente del Emisor estará hoy en Barranquilla, para asistir a un encuentro con empresarios, y se espera que durante la reunión entregue anuncios precisos sobre el futuro del teatro Amira.
Lo último que se informó sobre el Amira fue la posibilidad de construir un complejo cultural. Este anuncio generó opiniones entre gestores culturales, académicos y gremios de la ciudad.
La idea, según lo explicó el secretario de Cultura, Juan José Jaramillo, es que alrededor del teatro se abran nuevos espacios para presentaciones musicales y artísticas que permitan mantener la esencia del teatro y a la vez ofrezcan sostenibilidad.
Gloria Peña, coreógrafa y gestora cultural de Barranquilla, dijo que el plan de crear un espacio multicultural no es nuevo, la idea también surgió desde la construcción del teatro.
'En aquel momento se habló de crear espacios alternativos como un salón exclusivo para danzas, como el que tiene el teatro Colón de Bogotá; sin embargo, por circunstancias que no conozco con claridad la idea nunca surtió efecto', dijo Peña.
Por su parte, Jesús Ferro Bayona, exrector de la Universidad del Norte, dice que la falta de funcionamiento del Amira en una ciudad como Barranquilla le resta atractivo desde el punto de vista de organizaciones culturales, por lo que el planteamiento sobre nuevos espacios le generan incertidumbre.
'Cuando veo que ahora se harán las obras dentro del marco que va a ser complejo cultural, no hay información, ni adecuada, ni suficiente, que diga cómo se hará ese complejo. Además eso no puede ser una distracción para que se retrasen las obras'.
Las fechas para empezar su intervención, que según Bayona en dos ocasiones se han aplazado, también generan interrogantes sobre 'cuándo y por qué tanta demora'.
'Ojalá el teatro se termine dentro de la planeación con la que Banrepública se comprometió'.
El escenario de auténticas obras que bajó el telón en el 2016 es además para Deyana Acosta, directora del Centro Cultural Cayena de Uninorte, un icono que debe complementar su concepto con laboratorios de creación y producción audiovisual y nuevas tecnologías.
Acosta, quien ha participado en los talleres de socialización de las obras del Amira, señala que es válido complementar el proyecto de remodelación con nuevas ideas que permitan acercar al ciudadano al teatro.
'Banrepública recogió ideas y nos dijo que más o menos esa era la visión que tenía para el teatro, pero no hubo nada concreto', indicó Acosta.
Que no pierda su esencia
Que el teatro no pierda su esencia y que los nuevos anuncios no interfieran en los planes que ya estaban previstos para el teatro, es la consideración que hace Carla Celia, directora de Carnaval de Barranquilla S.A.S, quien ve con buenos ojos que alrededor del Amira se haga un complejo cultural que haga conexión con el corredor cultural que se viene desarrollando en el sector.
'Tendremos en un mismo sector la Casa del Carnaval, la Fábrica de Cultura, el nodo de industrias creativas del Sena, el Museo del Caribe, eso hace que se enriquezca la infraestructura cultural de la ciudad'.
Mientras que Ricardo Plata, presidente de Intergremial Atlántico, coincide en que los planes que se han revelado no tienen porque incidir y condicionar los arreglos del teatro y su puesta en funcionamiento.
'No suena mal, pero es importante saber y conocer el plan. Es importante que esas nuevas adecuaciones se hagan en un cronograma independiente', dijo Plata.
Cronograma
El Banco de la República, encargado de las obras de remodelación del Amira, informó en junio pasado que el proyecto final se estaría radicando a finales de 2020 y comienzos de 2021. La entidad explicó que la radicación se haría luego de trascurridos los dieciocho meses que se estima durará el desarrollo de los diseños que se iniciarán en el segundo semestre de 2019.
En el segundo trimestre de este mismo año se daría curso a la contratación de los diseños. En junio Banrepública dijo que llevaban a cabo los análisis de prefactibilidad financiera y técnica del proyecto.
