En una de las salas de informática de la I.E.D Ciudadela 20 de Julio se cambiaron los computadores por los escombros. Dentro de la habitación, enclaustrada hace más de un año por los fallos en la estructura del techo, huele a polvo y a guardado; y los pocos equipos que
ahí quedan están cubiertos en una manta de olvido y abandono.
Durante el recreo, un grupo de estudiantes jugaba a las afueras de la sala, cuyas puertas están cerradas. Cuando el profesor de informática abrió el portón del salón, la misma cerradura tuvo que ser forzada para ingresar. Adentro parecía más un cuarto de San Alejo que un aula de clases.
En los escritorios en donde antes estaban ubicados los computadores ahora hay piezas del cielo raso y otros utensilios del colegio, almacenados en el salón tras estar tanto tiempo inhabilitado. Según contaron los docentes, el techo se vino abajo durante las vacaciones de los alumnos, lo que 'evitó' una tragedia.
A pesar de que no hubo víctimas directas por la caída del techo, unos 1.600 estudiantes los afectados por la situación, pues solo tienen una sola sala de informática en la institución educativa. En total, los dos salones de esta materia del colegio tienen capacidad para 80 alumnos, que desde el incidente se ha reducido a la mitad.
'Nos toca cuadrar para llevar a los alumnos a la sala menos tiempo porque toca rotar la única que hay entre todos los del colegio', manifestó el profesor de informática y tecnología, Jorge De la Hoz. 'Ya hace más de un año que está la situación así y los jóvenes necesitan del acceso a los computadores para efectivamente aprender en la asignatura'.
Según manifestó el docente, han intentado contactar a la Secretaría de Educación de Barranquilla sin éxito, pues no han recibido respuesta ante la emergencia que viven en la institución. 'Los estudiantes merecen más tiempo en la sala de informática para aprender mejor y con más calidad, pero para eso necesitamos las dos habilitadas', agregó.
En los recreos, el único espacio del día en el que los jóvenes deambulan por las proximidades del salón, los jóvenes se dedican a descansar o a jugar cartas, hasta que suene nuevamente la campana para el regreso a clases.
La institución educativa, con más de una docena de aulas, tiene en la sala de informática número dos la oveja negra, pues a pesar del buen estado de las instalaciones, este espacio permanece clausurado.
Los líderes del barrio Ciudadela 20 de Julio también se manifestaron sobre la problemática e indicaron que 'por la importancia del colegio en la zona' este arreglo debería ser 'prioridad' para el Distrito.
Además, denunciaron que los recursos de auxilio asignados a la Secretaría de Educación son 'muy bajos' y que por eso 'el presupuesto no alcanza' para solucionar este tipo de incidentes.
'Son 1.600 estudiantes que tienen una sala de informática casi que vacía, sin equipos y cerrada. Es inaudito y es algo que deben solucionar lo más pronto posible', dijo Jorge Martínez, líder del barrio Ciudadela 20 de Julio.
Para este líder, habitante del barrio desde su fundación en 1980, esta institución educativa es de 'vital importancia' para el barrio y es menester de las autoridades distritales mantenerla 'a punto' y 'en perfectas condiciones'.
'Acá se han graduado muchas generaciones de barranquilleros y este es un colegio que merece tener sus aulas en las mejores condiciones posibles', expresó Martínez.
Sobre el tema, la secretaria de Educación de Barranquilla, Bibiana Rincón, manifestó que 'para este tipo de arreglos que representan una cuantía mínima, las instituciones educativas distritales cuentan con unos recursos por concepto de gratuidad y calidad, que son otorgados por parte del Distrito y el Ministerio de Educación Nacional'.
'En el caso de la IED Ciudadela 20 de Julio, un equipo de la Secretaría de Educación realizó una visita el día 23 de Abril de 2018, donde se hizo la inspección del espacio y se entregó el concepto técnico, para que el plantel educativo utilizara los recursos de gratuidad y calidad que recibe anualmente y así se procediera con el arreglo de la parte afectada en esta institución', concluyó.