Como parte de las obras de ampliación de la Plaza de la Paz se restaura la Casa Catinchi. Este inmueble ubicado sobre la esquina que une la carrera 45 y la calle 50 está siendo intervenido con el ánimo de recuperar y conservar su estilo neoclásico.
La restauración de la casa está programada para ser puesta al servicio antes de finalizar este año. Pero mientras eso sucede se continúan los trabajos en paredes, pisos y techo.
Las ventanas se mantendrán iguales, los cambios serán mínimos, teniendo en cuenta que la casa se encontró bastante deteriorada y con algunas modificaciones y divisiones que no hacían parte de su distribución original, según lo explicó el arquitecto residente de la obra Misael Rocha.
'Externamente estamos haciendo una recuperación de todas las caras del inmueble. Se tuvo que demoler la losa que tenía y hacer una nueva por el deterioro que presentaba'.
Así mismo, detalló que para garantizar que la casa conserve su esencia se hizo un levantamiento y registro fotográfico antes de intervenirla, para que, al final, se entregue una réplica a la ciudad.
'Hemos trabajado en dejar una especie de espacios más amplios para diferentes usos', agregó.
La casa, ubicada en el que era el barrio Las Quintas fue incluida a finales del 2017 en un listado de 15 inmuebles que cumplen con los criterios de valoración para poder ser declarados patrimonio arquitectónico de Barranquilla.
Fiel a los postulados del neoclasicismo francés, la restauración registra un avance del 30%.
La parte exterior y algunos muros de mamposterías también se está recuperando casi que en su totalidad.
El inmueble fue adquirido por el Departamento del Atlántico dentro de un paquete de 18 predios que se requirieron para la ejecución de la segunda etapa de la Plaza de la Paz.
