Compartir:

La acumulación de una gran cantidad de palos, ramas y troncos de madera en la playa de Puerto Velero en Tubará, Atlántico, ha llamado la atención de turistas que han transitado la zona.

El fenómeno natural, considerado un arribazón de madera flotante, se da en época de verano con las fuertes brisas, en especial en los meses de enero a marzo, según lo explicó la Corporación Autónoma Regional del Atlántico (Cra).

'Son residuos que recoge la cuenca alta del río Magdalena y es arrojada al mar, que los reparte entre Atlántico y Bolívar', explicó la entidad.

Además de Puerto Velero, las playas de Puerto Mocho, Punta Roca, Salgar, Sabanilla, Puerto Colombia, Tubará y Juan de Acosta se han visto afectadas por este fenómeno, que, según la Cra, 'es muy complicado de evitar'.

'Solucionar la problemática implica un trabajo nacional desde la cuenca alta. El fenómeno se viene incrementando a pesar de que se realizan jornadas de limpieza todo el año coordinadas con la Gobernación, la Dimar, las Fuerzas Militares, los municipios y algunas ONG'.

En algunas playas, la madera se ha mezclado con basura, lo que ha empeorado el problema ambiental.

Para la representante a la Cámara Martha Villalba la contaminación en las playas es 'lamentable' y 'persiste sin solución a la vista'.

'Es preocupante en las orillas la cantidad de basura y sedimentos provenientes del río Magdalena, pero al esfuerzo del gobierno debe sumarse nuestro sentido de pertenencia por el cuidado de nuestras playas', manifestó Villalba.

Además, la representante a la Cámara confirmó que el tema fue propuesto para un debate en el Congreso de la República, pero que aún está en espera de la fecha oficial para presentarle la problemática al resto de senadores.

Ante el fenómeno, la postura de la Alcaldía de Tubará y de los comerciantes de Puerto Velero es que 'la madera beneficia la zona porque evita que se levante el nivel del agua'.

Además, según manifestó el secretario de Gobierno de Tubará, Martín Rolong, 'se están planificando estrategias de financiación sostenible de la playa con toda la madera que, por fenómenos naturales, se acumula en la zona'.

Los comerciantes, por su parte, aseguran que los troncos han servido de 'muralla natural' contra la erosión costera y se manifestaron a favor de que permanezcan en la playa de Puerto Velero.

'Los troncos, que están ubicados en la playa de atrás, han formado dunas de arena que evitan que el agua se nos meta hasta la zona comercial de Puerto Velero. Si las quitan nos perjudican', dijo José Vega, comerciante del sector.