Desde noviembre pasado, cuando se inauguró la carrera 38, las críticas en torno a los trancones y el caos vehicular en esa zona del noroccidente de la ciudad no cesan.
Vecinos, conductores y usuarios en general de la vía cuestionan el cierre de algunas bocacalles y la 'mala organización' de los carros que transitan por la 38 hacia la avenida Circunvalar y hacia el corregimiento de Juan Mina.
El trancón, según vecinos, se genera debajo del puente de la Circunvalar y se extiende por toda la 38, en ambos sentidos.
Usuarios señalan que la problemática se debe al cierre de las intersecciones para los barrios Las Estrellas y Las Colinas, por lo que los carros deben bajar por la carrera 38 hasta la rotonda para poder dar la vuelta y entrar a las urbanizaciones. En este punto confluyen los vehículos livianos, de carga y buses que vienen desde Juan Mina, los que vienen de la Circunvalar y los que bajan de la 84B.
La situación se registra durante las horas pico y conductores aseguran que se demoran 'hasta 30 minutos para poder salir del trancón'.
