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El arroyo de la 91 y 92 pasó este miércoles a ser parte de la historia de Barranquilla y de los recuerdos de los vecinos y conductores que sufrían cada vez que llovía, por el peligro que representaba.

Así lo aseguró el alcalde de Barranquilla, Alejandro Char, al poner en servicio la intersección de la carrera 53 y las obras de canalización de la corriente de agua que pasaba por esta zona del norte de la capital del Atlántico y afectaba la movilidad.

El tramo vial puesto al servicio ayer es el de la calle 91 con carrera 53 hasta la calle 92 con carrera 51B, con el cual la vía queda habilitada hasta Villa Carolina, donde desembocaba el arroyo.

'Muchos no tuvieron la oportunidad de ver cómo se canalizaba este peligroso arroyo, aquí se usó una tecnología muy importante, todo se hizo por debajo. Es una muestra de la ingeniería local que hoy le permite a Barranquilla ponerle fin a otro arroyo, ya no sufriremos más este problema y la ciudad sigue dando ejemplo de cómo podemos salvar vidas y evitar tragedias', anotó Char.

La vía habilitada por el mandatario cumple con 'los mejores estándares de seguridad vial', demarcada con carriles amplios e iluminada con tecnología led. Ahora el contratista continuará trabajando en la recuperación de andenes y la instalación subterránea de redes.

En la canalización del arroyo de la 91 se usó la técnica Jacking Pipe (perforación horizontal dirigida), que permitió trabajar con una máquina que taladró la parte inferior de la vía sin tener que romper el pavimento, lo que garantizó un proceso constructivo con el menor impacto posible en movilidad y convivencia de los vecinos.

El arroyo de la calle 91 y 92 tenía una longitud de 1.500 metros lineales. Recorría los barrios de la localidad Riomar y su canalización beneficia a más de 100.000 habitantes.

En desarrollo del plan de canalización de arroyos, presentado a la ciudad en el año 2016, el alcalde Char ya entregó la totalidad de la calle 76, que se encuentra habilitada para el tráfico vehicular, y actualmente el Distrito interviene un tramo restante en la calle 75 y los trabajos de urbanismo y espacio público. También se avanza en la canalización del arroyo de la carrera 21, el arroyo Hospital, el arroyo de la 64 y 65, y el de Felicidad.

El mandatario agradeció a todo el equipo que adelantó la construcción de la obra, ingenieros, arquitectos, constructores y operarios, por la implementación, el desarrollo y la aplicación de tecnologías avanzadas que ayudaron a resolver un problema de antaño.