Desesperados, así dijeron sentirse los habitantes de la carrera 28A entre calles 19 y 20 en el barrio Hipódromo en Soledad, al reportar a través de la línea Wassapea a EL HERALDO el rebosamiento constante de las alcantarillas y una obra de pavimentación inconclusa en inmediaciones de sus viviendas.
Jair Guerrero de la Hoz, mecánico de 40 años y residente del sector, aseguró que la situación empeora cada vez que llueve porque las aguas servidas emergen por el sanitario, los grifos de las duchas y se estancan en las afueras de sus casas, convirtiéndose en foco de contaminación.
'Ya esto va para un año de estar así. Reventaron y dijeron que iban a arreglar y nada, entonces cuando llueve el agua de alcantarilla sale por el sanitario, se inunda la casa y nos están perjudicando', narró Guerrero.
Por su parte, Rita Charris Pertuz, también habitante del sector, manifestó que el estancamiento de estas aguas ha acrecentado la aparición de mosquitos y los olores fétidos que emanan del lugar han mandado a más de una persona al hospital.
'Ya los mosquitos nos tienen locos dándonos pico a toda hora. Somos cuatro las señoras que estamos enfermas y uno de mis nietos fue llevado de urgencias porque hace una semana presenta dolor de cabeza por el olor pestilente que nos calamos todos los días', dijo Charris.
Entretanto, Luis Carlos Pérez, auxiliar de transporte y residente del barrio Hipódromo, indicó que han acudido al contratista de la obra e igualmente a Triple A, pero ninguna de las entidades les da una repuesta clara ni una solución a la problemática.
'El contratista lleva casi un año, desde agosto de 2017, con la calle intervenida y nada que termina, han abierto todos los manjoles. Entre el contratista y Triple A se tiran la pelota', aseveró Pérez.
La comunidad aseguró que si no ven pronta intervención se tomarían las vías de hecho para lograr que los escuchen y lograr una solución a la problemática.
Con respecto a las quejas de la comunidad, la empresa Triple A sostuvo que el rebosamiento de las alcantarillas es producto de las obras que se adelantan en el sector por parte de un contratista municipal y es esta firma quien debe hacer las reposiciones requeridas en la zona.
'En el sector se adelantan labores de pavimentación, de reposición y de empalme de redes de alcantarillado por parte de un contratista de la administración municipal. El rebosamiento de las alcantarillas es producto de las obras en el sector que taponan las redes y lo que se estanca es agua lluvia con agua residual', dijo la empresa.
EL HERALDO intentó comunicarse con la ingeniera Peggy Álvarez, secretaria de Obras Públicas de Soledad, para conocer la posición de la Administración municipal en torno a las quejas de la comunidad, pero no fue posible.