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Por medio de una acción popular, los comerciantes aledaños a la vía La Cordialidad buscarán frenar las obras de ampliación. 

El gremio de comerciantes y algunos residentes del sector, interpusieron la semana pasada una acción popular con la que buscarán detener las obras hasta que el consorcio encargado de la ejecución y los funcionarios del Distrito se sienten a concertar y socializar el proyecto, para llegar a un acuerdo que 'mitigue el impacto social que causará el tener los negocios cerrados'. 

De igual manera, se espera que gremios de mototaxistas, transportadores de servicio público y grupos animalistas se sumen a las protestas en contra de la obra, puesto que, según ellos, se les prohibirá la circulación por La Cordialidad, y se presume que se talarán alrededor de 650 especies de árboles. 

Los comerciantes reiteraron que se les están 'vulnerando' sus derechos, debido a que 'no hubo una correcta socialización' por parte del Distrito y no se tuvo en cuenta la estipulación de la zona como sector comercial. 

Daniel Márquez, propietario de una ferretería en la carrera 16 con La Cordialidad, afirmó que tal como la obra está contemplada, de seis carriles, dos en ambos sentidos que serían exclusivos para Transmetro, los dejaría sin un lugar donde parquear, lo que los perjudicaría 'de gran manera', debido a que los negocios necesitan una sola para parqueo de clientes y de vehículos que llegan a cargar y a descargar material. 

'No es que los comerciantes pretendamos detener el desarrollo de la ciudad, solo que necesitamos que respeten sus derechos y el Distrito se debe sentar a dialogar', manifestó Márquez, quien además sostuvo que en reiteradas ocasiones han intentado que el alcalde Alejandro Char los escuche, pero no ha sido posible. 

Por otra parte, Carlos Mercado, propietario de un negocio de venta de peces exóticos y productos veterinarios, y quien reside en el sector desde hace más de 40 años, afirmó que la obra 'es un atropello' contra todo el sector comercial de la zona. 'Genera un impacto negativo sobre las ventas y evita la posibilidad de que la ciudadanía pueda detenerse a realiza compras, porque no contempla zonas de parqueos o espacios para los negocios', sostuvo el comerciante. 

Ambos negociantes coinciden, además, que el Distrito manifestó que no tienen contemplado ningún tipo de indemnización para los negocios afectados durante el tiempo de ejecución de la obra. 'Pretenden comprarnos el metro cuadrado a $174 mil pesos, cuando el precio real del mercado sobrepasa los $2 millones', aseveró el comerciante Carlos Mercado.