Parte del techo del salón Pedro Biava de la Escuela de Bellas Artes, colapsó la madrugada de ayer, según reportaron estudiantes a través de la línea de Wasapea a EL HERALDO.
El hecho ocurrió a las 3:00 de la madrugada, luego que cedieran las vigas de madera y parte de la base de concreto que sostenía la cubierta.
Estudiantes afirmaron que esta sería la segunda vez que el techo cede, luego de transcurrir siete meses del anterior accidente provocado por el desplome de un muro de concreto que arruinó cuatro salones del programa de Música de la facultad.
Cabe recordar que en agosto del pasado año, la comisión de arquitectos de la Universidad del Atlántico, a través de un estudio de habitabilidad, determinó que era necesaria la intervención de dos de sus bloques, el Pedro Biava y Galería, dado a que factores como la humedad y el comején 'han afectado las vigas que sirven de soporte' de las estructuras.
En la mañana de ayer, el rector de la Uniatlántico, Carlos Prasca, y funcionarios de la Oficina de Planeación de la institución inspeccionaron las instalaciones para evaluar daños y posibles causas del incidente.
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No a las adecuaciones
En diálogo con EL HERALDO, el rector del alma máter, precisó que alrededor de 150 estudiantes que ven clases en este inmueble serán reubicados en el Edificio Santo Domingo, de la sede Centro ubicada en la carrera 43.
A su vez añadió que implementar estrategias de intervención a partir de la estructura existente es 'echar dinero en un saco roto'.
'Hay que replantear en conjunto con el Ministerio de Educación y la Secretaría de la Ciudadela Universitaria, hacer el mejoramiento y las restauraciones en los edificios que son patrimonio arquitectónico, pero también construir otras áreas que requiere la escuela para los estudiantes. La estrategia es recuperar los edificios pero no se puede seguir invirtiendo en adecuaciones porque por el tiempo de construcción, han perdido su capacidad estructural', dijo Prasca.
Por su parte, Jonathan Camargo, representante de los estudiantes ante el Consejo Superior de la Universidad del Atlántico, sostuvo que este tipo de situaciones suceden por la 'desidia' del rector y la Administración, donde este último 'desconoce' la realidad de la universidad.
'Indudablemente, se requieren unos estudios más exhaustivos y una mayor inversión que realmente fortifiquen esa infraestructura y le den la condición que merece. Asimismo, asumir como Administración una postura contundente que busque la mejora de nuestra sede que es patrimonio de la humanidad', dijo.
