Compartir:

La Troja fue cerrada por diez días por invasión de espacio público en medio de la celebración del comienzo del 2018, este 1 de enero.

El lunes, varios asistentes organizaron una ‘comparsa’ espontánea que bailó a lado y lado de la carrera 44 al son de Carnaval en la calle.

Edwin Madera, propietario del lugar, aseguró en diálogo con EL HERALDO que a las 11:30 p.m. del lunes la Policía llegó a cerrar el lugar por violar el nuevo Código.

'La Policía Nacional acudió al establecimiento como a las 11:30 de la noche del primero de enero a decirnos que estábamos violando el Código con la invasión del espacio público, pero lo cierto es que nosotros no estábamos vendiéndole licor a nadie en la calle. De nuestro establecimiento no salió licor ni nada para las afueras del perímetro del local, la gente llegó de manera espontánea a las calles y esa situación se nos sale de las manos', explicó Madera.

El propietario reconoció que ciertamente había una cantidad considerable de personas en los alrededores de La Troja, pero 'todo se desenvolvió en un ambiente de festejo y celebración. No hubo peleas, riñas ni nada de eso. Pero eso de controlar a la gente y los vendedores ambulantes sí le corresponde a la Policía, no a nosotros'.

Madera informó que pese a que 'no hubo multa monetaria, hubo fue un comparendo. Entiendo el cierre del local durante la noche del lunes, pero no comparto la sanción del cierre por los 10 días. Yo pensaba abrir cuatro de esos diez días que me cerraron. Viernes, sábado, domingo y lunes, porque es festivo', manifestó el comerciante, quien aseguró que la medida representa un atentado a su economía, debido a que la sanción 'solo arrojará pérdidas en el desarrollo de la actividad'.

'Una persecución'

Madera aseveró que la medida le parece 'una persecución policial', teniendo en cuenta que 'en varios locales del sur de la ciudad se presentó la misma situación y no hubo cierre de locales'.

'Este es un negocio patrimonio de la ciudad, no solo me afectan a mí, mi familia y mis empleados, sino a toda una ciudad que busca divertirse de manera sana y alegre y que lo ha venido haciendo por casi 52 años', manifestó Madera.