Era principios de la década de los 50, más exactamente el 5 de enero de 1950, cuando un joven de 23 años llamado Gabriel García Márquez comenzó sus pinitos periodísticos en el diario EL HERALDO, en ese entonces ubicado en el centro de Barranquilla.
‘Gabo’, que estaba en plena adolescencia, se alojaba en esa época en un viejo edificio de cuatro pisos que funcionaba como casa de hospedaje y estaba ubicado en la Calle Real, en pleno centro de ‘La Arenosa’.
Según cuenta el periodista Juan Gossaín, en un artículo publicado por la revista Cromos en 1971, el nacido en Aracataca, Magdalena, pagaba un peso con cincuenta centavos por dormir sobre una estera en una habitación que medía tres metros de largo por tres de ancho.