El paseo por Barranquilla no terminó de la mejor manera para Clara Emilia Zuluaga y Julio Quintero, una pareja de adultos mayores que tardó más de diez horas para llegar a Medellín, su ciudad de residencia.
El viaje, que normalmente demora un poco más de una hora, lo cumplieron en 10 porque tras una espera de 6 horas en el Cortissoz su vuelo fue reprogramado, pero no directamente sino con una escala en Bogotá que tardaría 4 horas.
Luego de pasar varios días visitando a sus nietos, Clara y Julio, de 80 y 85 años respectivamente, llegaron ayer a primera hora al Aeropuerto Ernesto Cortissoz para abordar el vuelo 9483 de Avianca, con destino hacia la ciudad de la ‘eterna primavera’.
La sorpresa para la pareja y sus familiares que los acompañaban para despedirlos, fue que debido a la huelga que realizan 700 pilotos de la aerolínea, el vuelo había sido cancelado, sin previo aviso a los viajeros.
'Esto nos ha perjudicado muchísimo porque ya nosotros no estamos para estos trotes de esperar muchas horas. Por lo menos hubieran avisado a los viajeros para que uno se programara mejor', manifestó Clara mientras esperaba junto a su esposo, quien reposaba en una silla de ruedas.
Así como esta pareja, fueron aproximadamente 300 pasajeros —de acuerdo con un trabajador de Avianca— los que se vieron afectados por la cancelación de ocho vuelos que salían ayer desde Barranquilla hacia Bogotá, Medellín y Cali.
Según la compañía aérea, la protesta, que empezó ayer, obligó a la suspensión de 150 vuelos en todo el país. Situación que ha afectado a más de 18 mil viajeros.
Incertidumbre
La barranquillera Rosa Borges vivió momentos de angustia por varias horas en el Cortissoz, debido a la cancelación del vuelo que la llevaría hasta Bogotá.
Borges, quien labora en la capital del país, pero se encontraba disfrutando de su periodo de licencia de maternidad en Barranquilla, viajaba con su bebé de cuatro meses para reincorporarse a su trabajo.
Contó que se enteró de la medida al revisar el estado del itinerario en la página web de la aerolínea, pero que no fue avisada por ellos previamente que había sido reprogramada para un vuelo más tarde al comprado. 'Llegué y la sorpresa fue que ni siquiera me dieron los motivos de la cancelación, simplemente nos dijeron que teníamos que esperar', manifestó la viajera.
Por su parte, Ángel Rentería, quien tenía comprado un vuelo directo hacia Medellín, contó que llegó al aeropuerto a las 6:00 a.m. para abordar el vuelo de 7:55 a.m., pero al llegar a la zona de check in le informaron que su vuelo había sido anulado y debía abordar otro que partiría al mediodía.
Rentería, quien trabaja como oficial de la marina, viajaba para visitar a su familia, que no la ve desde hace varios meses. 'Lo peor de todo es que el vuelo que me ofrecieron es hacia Bogotá, lo que me retrasa todas las actividades que tenía preparadas para hoy. Es algo completamente injusto', indicó.
La cancelación del vuelo 9537 con destino hacía Bogotá le generó un 'grave' problema laboral a José Dorado, un asesor comercial que debía estar a primera hora en la capital del país para una jornada de capacitación.
Dorado narró que debía abordar el primer vuelo del día, ya que el compromiso laboral era a las 9:00 a.m., pero solo llegaría hasta la capital del país en horas de la tarde por los problemas con la huelga. 'No sé si es justo o no lo que pelean los pilotos. Pero lo que no es justo es la falta de respeto de la aerolínea. Ellos deben responder por el daño que le causan a los usuarios', aseveró el usuario.