El bebé que lleva Daneisy Vargas en su vientre ahora tendrá un nombre diferente. En vez de Santiago Alejandro se llamará Santiago Moisés, en honor al 'salvado de las aguas', el personaje bíblico. Así lo decidieron sus padres, dos barranquilleros retornados de la isla San Martin, tras vivir la tragedia que dejó a su paso el huracán Irma.
La mujer embarazada, de 19 años, llegó ayer a Barranquilla en compañía de su pareja, William Martínez, de 22, ambos repatriados por la Cancillería y la Fuerza Aérea de Colombia. Después de casi 10 días sin poder comunicarse con sus familiares, lograron reencontrarse.
Abrazos y lágrimas dominaron el instante. Lo primero que hicieron las cuñadas de Daneisy fue preguntarle por el estado de salud del bebé, que está próximo a nacer. La mujer dio un parte de tranquilidad al contar que se encontraban bien.
La pareja pisó suelo barranquillero luego de una escala en Bogotá y un desvío a Cartagena, causado por las fuertes lluvias. Al aeropuerto Ernesto Cortissoz llegaron sobre las 6 p.m. con una sola maleta, que cargaba lo único que pudieron rescatar: ropa de bebé.
'Ahora debemos empezar de cero. Es una situación muy complicada porque nos vinimos sin nada', contó Martínez.
Ambos habían arribado a hace un año a la isla, ubicada a unos 240 kilómetros de Puerto Rico, con el sueño de un mejor futuro. En San Martin tenían empleo y pagaban arriendo en una casa, que quedó destruida, destechada.
Fueron cerca de cuatro horas de pánico, producto de la fuerza de Irma. De acuerdo con las autoridades neerlandesas, el potente huracán acabó con hasta el 70% de los hogares y edificios en San Martin.
Mientras eso ocurría, la agonía se apoderaba de los familiares de ambos, que desde Barranquilla, hicieron fuerza para que regresaran a Colombia con vida.
'Fueron días muy duros para nosotros también. Yo creo que apenas ahora podré dormir tranquila', expresó Claudia de La Hoz, madre de Vargas.
'En la familia los llenaremos de amor para que se recuperen pronto de esta tragedia', aseguró.
Final feliz
Por falta de unos documentos, la madre barranquillera Yiselle Fuentes estaba alejada de sus hijos, quienes habían sido repatriados el pasado miércoles.
Fuentes tomó el primer vuelo del jueves de Barranquilla rumbo a Bogotá para poder ver a sus hijos Joanni y Jayden Henao Fuentes, quienes estaban en poder del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.
A las 2:00 de la tarde Fuentes volvió a ver y a abrazar a sus hijos, y sintió que Irma no había acabado con su familia.
'El reencuentro con mis hijos fue muy especial, todos estábamos súper emocionados', expresó Fuentes.