De acuerdo con un estudio realizado por el Observatorio de Educación del Caribe Colombiano (OECC), de la Universidad del Norte, los datos más recientes sobre la Matrícula y la Deserción recopilados por el Dane arrojaron que 16.586 estudiantes de los niveles de Preescolar, Básica y Media del departamento del Atlántico desertaron de sus estudios antes de finalizar el año electivo 2014.
Por medio del informe, se detalló el número de matrículas finales de dicho periodo, la cantidad de estudiantes que abandonó los estudios, así como la tasa de deserción en Barranquilla y cada uno de los municipios del departamento.
En el caso de la capital atlanticense, 269.123 estudiantes se matricularon y 8.790 desertaron, lo que da una tasa de deserción del 3,3%. Igualmente, se registró que Galapa (10,1%), Santa Lucía (6,3%) y Ponedera (5,1%) están entre los municipios con la tasa de deserción más alta; mientras que Manatí (0,0%), Campo de la Cruz (0,2%) y Puerto Colombia (0,8%) tienen la tasa más baja. (Ver infografía)
De acuerdo con la información suministrada por la OECC, 'a la fecha no se cuenta con la información más actualizada, pero el reporte del Dane muestra que la tasa de deserción a nivel departamental ha venido disminuyendo y se ubica por debajo de la media nacional (6,4%), en el registro del año 2014'.
Causas y soluciones
Al ser consultado por EL HERALDO, el secretario de Educación del Departamento, Dagoberto Barraza, expresó que sería necesario realizar un estudio detallado para establecer con exactitud las causas de lo que refleja dichas cifras, ya que 'muchas veces se toman los datos con los alumnos que se han retirado, pero hay que ver hacía a donde se fueron, es decir, a veces pasan de la pública a la privada, de una región a otra y de un ente certificado a otro'.
A pesar de lo anteriormente mencionado, el funcionario indicó que, de acuerdo con lo que la Secretaría ha analizado, una de las razones principales por la cual los estudiantes abandonan sus estudios, obedece a que los 'jóvenes no ven oportunidades de continuar sus estudios, al culminar su formación inicial. Es decir, no tienen el optimismo de poder ingresar a la educación superior'.
Con el fin de contrarrestar dicha posible causa, Barraza expresó que es necesario 'fortalecer las oportunidades en educación superior', bien sea técnica, tecnológica o profesional. Asimismo, aseguró que en el Atlántico están buscando la posibilidad de tener más seccionales de la Universidad del Atlántico en municipios, ya que 'el desplazarse hasta Barranquilla más el mantenimiento de una carrera universitaria elevan bastante los costos'.
El secretario agregó que también es trascendental incentivar a los jóvenes y que los rectores y docentes inculquen a los estudiantes las oportunidades que tienen.
'El día de hoy (ayer) estamos preparando a mil estudiantes de 11 grado para las pruebas saber, con el fin de qué le apuesten a la beca Ser Pilo Paga y no bajen el rendimiento. Con esto conseguimos que más del 15% de los jóvenes que hoy están en el último grado lleguen a educación superior', puntualizó.
Por su lado, la secretaria de Educación del Distrito, Karen Abudinén, indicó que en la capital del Atlántico también se está trabajando para combatir esta problemática, la cual, aseguró, se presenta muchas veces por la falta de alimento y por la dificultad para transportarse hasta la escuela.
'La falta de alimento es una de las rezones por la cual los niños desertan, y para esto tenemos el plan de alimentación escolar, en el cual estamos haciendo una inversión aproximada de $25 mil millones. Por otro lado, tenemos el programa del transporte escolar, cuya inversión es de casi $6 mil millones anuales'.
Asimismo, la funcionaria aseguró que también se lleva cabo el programa de psicoorientación, en el cual, 'cuando un niño deja de ir mucho al colegio, se le hace acompañamiento a la familia para conocer los motivos de las ausencias y para ver de qué manera podemos nosotros incentivarlos para que se mantengan en el sistema educativo'.
'Por esta razón, se ha venido bajando la deserción, ya que hemos tenido programas que han generado el mantenimiento de los niños', puntualizó la secretaria.
El docente investigador del Instituto de Estudios en Educación (IESE) de la Uninorte, Marco Turbay, considera que ese abandono del sistema escolar ocurre por diferentes factores y que 'puede estar asociado a que el joven tenga alguna creencia personal sobre la educación, motivada por sus padres, la cual no les facilité, no les interese o no les importe porque hay una premura que es el tema de la producción económica'.
'Las soluciones auténticas están en la medida en que escuchemos a la población. Hay que seguir buscando alternativas, oportunidades y que los incentivos sigan', agregó el educador.
