Desde hace tres meses, una porción del arroyo Rebolo se ha convertido en una improvisada fuente artificial que suscita más repulsa que alegría entre los habitantes de la carrera 23 entre calles 28 y 29, en el barrio Montes. Esta situación no deriva de un ‘milagro’ de la naturaleza, es consecuencia de una ruptura en el tubo metálico de 30 pulgadas.
Para los moradores de la zona esta situación es, cuanto menos, alarmante. Un equipo periodístico de EL HERALDO realizó un ejercicio para dimensionar la magnitud de la fuga y, en efecto, el resultado es preocupante. Lo que empezó como un goteo inocuo se transformó en un chorro fuerte y constante.
Bajo el tubo averiado, bastan 79 segundos para llenar un balde de 12 litros. Al cabo de una hora, se pierden 546 litros de agua y, de esa forma, en un día se están desperdiciando 13.104 litros del preciado líquido, lo que equivale a completar 1.092 recipientes de igual capacidad en 24 horas. Si en una vivienda el consumo mensual permitido es de 32 metros cúbicos (m3) de agua, lo que se despilfarra en esta fuga alcanza para el suministro de 12 hogares.
Este medio ha reseñado el inconveniente en distintas oportunidades; sin embargo, la avería en la tubería de conducción del recurso hídrico que sale de la Estación de Agua Potable No. 2 del Acueducto de Barranquilla hacia la estación Recreo no ha sido reparada de forma satisfactoria.
El pasado 7 de marzo Triple A anunció la realización de los trabajos pertinentes para solventar el inconveniente. Sin embargo, las obras no cumplieron las expectativas y, con base en el testimonio de varios habitantes del sector, en menos de dos días la fuga de agua volvió a manifestarse, esta vez con mayor fuerza.
Piden cambios
Jairo Bilbao Ariza, habitante del barrio Montes, expresa que la principal preocupación de la comunidad se basa en el mal estado que presentan tanto la tubería como la válvula reguladora del flujo. 'Hace un mes y medio vinieron a arreglar el daño, pero la solución no duró ni dos días', dice mientras señala con su dedo índice izquierdo la corriente de agua que pasa por la calle 28.
Adicionalmente, el hombre de 52 años sostiene que están 'cansados de las excusas' y la espera planteada por la empresa encargada de operar los servicios de acueducto, alcantarillado y aseo en la capital atlanticense. Su principal temor está fundamentado en un eventual colapso de la tubería, escenario que podría dar lugar a una emergencia mayor.
En opinión de Róbinson Rico, residente de la zona, resultan incompatibles las campañas para evitar el desperdicio del preciado líquido y la realidad que palpa con sus vecinos. 'Nada tiene sentido porque aquí se está botando el agua desde hace varios meses. Dicen una cosa, pero no son capaces de resolver este problema', cuestiona.
Rico afirma que la última vez que Triple A dispuso un equipo técnico para superar el inconveniente, el efecto de la solución fue efímero. Por ese motivo, aguarda una pronta y efectiva solución para el inconveniente. 'El problema sigue y es cada vez mayor, lo que tiene que hacer la empresa es reparar el daño y asegurarse de que no se vuelva a presentar', dice.
Respuestas
En relación con la asunción del costo del líquido desperdiciado a causa de este daño, Triple A sostiene que las fugas que se presentan en tuberías de conducción y distribución corresponden a 'pérdidas técnicas' del sistema de acueducto, por lo que es competencia de la compañía cobijar los gastos.
De acuerdo con la empresa, la reparación del daño conllevaría la interrupción del suministro en varios sectores de Barranquilla y Soledad. 'Esta reparación requiere una planificación especial en la cual Triple A ya está trabajando. Próximamente se dará a conocer la fecha, horario de interrupción y zonas que quedarán cobijadas para que las empresas, instituciones de salud, colegios y viviendas puedan preparar sus sistemas de almacenamiento y abastecimiento', informa la compañía.
Mientras la planificación y la ejecución de las obras convergen para lograr una solución definitiva, los habitantes del barrio Montes seguirán viendo impotentes cómo se desperdician más de 13.104 litros de agua diarios en ese punto de la localidad Suroriente.
Sobre el caso del barrio Montes, Triple A aseguró que está diseñando un proyecto, como solución definitiva, que consiste en reemplazar 90 metros de tubería, cambiando la existente por una de hierro dúctil en 36 pulgadas, acerrojada, de mayor diámetro para ampliar la capacidad de transporte desde el acueducto hasta la estación Recreo. Esta tubería se encuentra en trámites de fabricación e importación desde los Estados Unidos, por lo que su instalación se ejecutará en aproximadamente tres meses.
Teniendo en cuenta que se trata de una tubería de conducción de 30 pulgadas que transporta agua desde el Acueducto de Barranquilla hasta la Estación de Rebombeo Recreo, su reparación requiere programar un pare técnico desde la ETAP (Estación de Tratamiento de Agua Potable), lo cual implica la interrupción del suministro de agua a varios sectores de esta capital y del municipio de Soledad.
