El presidente de la Unión Nacional de Comerciantes, Undeco, Orlando Jímenez señaló que con el alza en la tarifa del gas de un 5% para las pequeñas industrias, comercio y usuarios residenciales confirmada hace dos días por el Ministerio de Minas, 150 panaderías en Atlántico podrían cerrar en máximo un año.
Jímenez señaló que las industrias y comerciantes pequeños se sintieron discriminados con el acuerdo al que se llegó entre el Ministro de Minas, la Creg, el Ministerio de Comercio y los gremios y parlamentarios, sobre la tarifa del gas en la Región Caribe
'Hay que sumar a esto el incremento en la tarifa de energía y la subida del dólar que aumenta el costo de los insumos', agregó.
Benjamín Rueda, propietario de la panadería La Arenosa manifestó su disgusto con respecto a la subida de la tarifa del gas que afecta directamente.
Indicó que los pequeños comerciantes 'como siempre somos los más afectados' y sostuvo que debe haber un equilibrio entre las industrias grandes y pequeñas. 'No puede ser que los que menos rentamos, tengamos esta desventaja', expresó.
El ministro de Minas, Tomás González informó que el precio del gas en boca de pozo para la industria de la Costa Caribe bajaría en un 18% a partir de ayer, lo que se reflejará en una reducción en la tarifa final del 12%.
Sin embargo, para las pequeñas industrias, comercio y usuarios residenciales subirá un 5%, lo que implicará un alza entre el 2% y el 3% en la tarifa final, la que podría ser mayor por la devaluación.
El director de Undeco sostuvo que de continuar esta situación de las 1.200 panaderías de la Región Caribe que están afiliadas a Undeco, en máximo un año de un '30% a un 40%' cerrarían.
Agregó que en Atlántico hay 750 panaderías, mientras que en Barranquilla están vinculadas a la asociación 550.
Para Ramiro Cabello Consuegra, administrador de la panadería Diana, este acuerdo de la tarifa del gas le 'complica mucho' la situación en su negocio.
'Con este aumento no podemos compensar nuestra producción porque si reducimos tamaños y aumentamos precios, la gente no nos compraría. Es difícil lo que se nos viene', puntualizó el panadero.
Cabello insiste que ante esta problemática se debe concientizar al cliente en que los precios del pan inevitablemente tendrán que subir.
Aunque Benjamín Rueda piensa que es 'imposible' aumentar los precios del pan en una ciudad como Barranquilla.
'El barranquillero sabe cuál es el buen pan, mira su tamaño de primero y su textura. El precio aquí es muy marcado', aseguró.
