La rectora encargada de la Universidad del Atlántico, Rafaela Vos Obeso, habló con EL HERALDO sobre las protestas y dudas que ha despertado entre algunos estudiantes el presupuesto elaborado para el año próximo, que tuvo una disminución del 14%, respecto al de 2015.
Vos asegura que este se 'ajusta a la realidad', y lanzó un dardo a la anterior Administración, que estuvo a cargo de Rafael Castillo, al decir que esta 'cambió el presupuesto como 20 veces y no pasó nada'.
La toma de los estudiantes por el presupuesto presentado completa ya más de una semana, ¿por qué no se ha resuelto?
En la reunión de asamblea del martes, a mi entender, se dieron unas conclusiones donde los estudiantes deberían reunirse en comités para poder trabajar el presupuesto. En eso quedamos, y en que el análisis que había entre ellos sería entregado al Consejo Superior, y a la administración, para mirar en dónde estaban sus expectativas presupuestales. Pero ayer (miércoles) vimos que se tomaron la rectoría, y eso no estaba acordado.
Tuvimos que llamar a la Defensoría del Pueblo, porque es una institución pública que está educando a más de 22.000 estudiantes, y ese es el pueblo. La universidad muchas veces se encuentra vulnerable ante los ataques que sufre por un grupo minoritario de estudiantes. Desde esa perspectiva hemos sido muy enfáticos en que nuestra voz de protesta es en relación a que hemos dado todas las garantías para generar consensos.
¿Por qué el presupuesto por $233.000 millones?
La Universidad del Atlántico todavía está en Ley 550, en un proceso de reestructuración hasta el 2020. Hemos actuado con transparencia para presentar un presupuesto que se ajuste a la realidad. No vamos a inflar presupuestos por más de $60.000 millones, como ocurrió con la Administración pasada. El dinero no está en caja y hemos dicho que cuando vengan los recursos se van a incorporar al presupuesto, porque este (el presupuesto) es flexible. La rectoría tiene los compromisos con responsabilidad social, si hay excesos podemos recibir sanciones.
¿Cuánto debe el Ministerio de Hacienda y cómo va el proceso de cobro?
Son cerca de $127.000 millones. Hemos ido a Bogotá a gestionar el convenio de concurrencia ante el Ministerio de Hacienda. Recibimos la noticia que ya lo firmaron, y no es algo por el paro, ya se venía haciendo gestión. Eso significa que el compromiso del Estado con la institución es una realidad.
Hay dudas entre la comunidad porque temen que con este monto van a quitarles algunos programas, ¿qué les dice a ellos?
No hemos adulterado nada de los rubros. Eso normal que un presupuesto cambie de un mes a otro, con las diferentes discusiones que agregan nuevos componentes. Tengo conocimiento que la administración pasada cambió el presupuesto como 20 veces y no pasó nada. En esta ocasión, porque hemos sido honestos con la comunidad, sencillamente nos acusan de cosas que no son. Les garantizo a los estudiantes que no vamos a recortar los almuerzos subsidiados, tampoco la matricula subsidiada, ni vamos a aumentar su costo.
¿Qué opina de la protesta estudiantil?
Ellos tienen que unirse a una bandera para justificar la toma, pero no son legales. Una universidad pública tiene que estar abierta, porque hay 22.000 estudiantes a los que les quitan el derecho a la educación 20 o 30 personas. No deben ser esos los estilos de lucha, que han sido desfasados. La universidad es de toda la comunidad.
Nos quitan el derecho a la comunidad de trabajar e ingresar a las dependencias. Serán escuchados siempre que sus métodos sean pacíficos, desde mi llegada ha habido muchos problemas. Pero hemos salido con el dialogo adelante.
¿Por qué decidieron cerrar el sistema para subir notas, ad portas de finalizar el semestre?
El sistema está siendo atacado. La universidad es muy vulnerable, cada momento tumban el sistema, hacen bullying por las redes. Para evitar eso, se pausó mientras esté el paro. Estamos protegiéndolo, porque el semestre está casi finalizado, solo faltan los exámenes finales. Además, los profesores están dando clase debajo de los árboles, en los pasillos o plazoletas, y eso no es justo. La universidad tiene sus salones dignos, ¿por qué se le corta el derecho al ingreso? En este momento muchos están desesperados porque el semestre puede peligrar y quieren que les suban las notas.
¿Cuál es la salida para esta crisis?
Estamos esperando que el Consejo Superior se reúna. Porque la solicitud de que el presupuesto se retire no es viable, porque ya se entregó y está en manos de los consejeros. El que tendría que retirarlo sería el Consejo, no yo. Y todavía le faltan dos o tres debates más. El plazo es hasta el 20 de diciembre.