La segunda iglesia más antigua de Barranquilla, San Roque, fue ‘testigo’ de una nueva edición de las tertulias de EL HERALDO. El tema, en este escenario, no podía ser otro que ‘El Centro: Herencia del pasado, construcción del presente’. 'Nuestro Centro Histórico tiene una riqueza incluso mayor que la del de Cartagena (Bolívar)', con esta frase la alcaldesa de la capital del Atlántico, Elsa Noguera, arrancó el conversatorio.
Del evento, en la nueva plaza de San Roque, participaron también Diana Amaya, secretaria de Espacio Público; Afif Simán, secretario de Cultura; Ramón Vides, gerente de Edubar; Ramiro Castrillón, comandante de Policía Metropolitana de Barranquilla; Mario Muvdi, presidente Cotelco Atlántico.
Además, Dina Luz Pardo, directora de Asocentro; Manuel Moreno, decano de arquitectura y diseño de la Universidad del Norte; Vivian Saad, fotógrafa; María Eugenia Castro, del Museo de Arte Moderno de Barranquilla, y Rodolfo Zambrano, abogado de la Academia de Historia de Barranquilla.
Pasadas las 4 de la tarde, el director de EL HERALDO, Marco Schwartz, le dio la bienvenida a los participantes y comenzó la tertulia, en el marco de los 82 años de esta casa editorial, invitando a la alcaldesa Elsa Noguera De la Espriella para hablar de lo que se ha hecho el Centro.
Vivian Saad. El Centro Histórico de Barranquilla, desde el año 1999, forma parte de los 44 que fueron declarados de interés cultural en el país. La noticia nos tomó por sorpresa en esa época, porque creo que estaba en su peor momento, pero fue escogido precisamente por la variedad de arquitectura que se encuentra allí. En esta zona hallamos toda la influencia de los inmigrantes, más la moderna con el ‘art-déco’, de Manuel Carrerá.
Elsa Noguera. En el Centro Histórico todo arranca con una nueva visión de ciudad. Cuando uno habla de esta zona se refiere mucho más que a la invasión de sus calles. Este sector de Barranquilla tiene una riqueza incluso mayor que la del de Cartagena, y todo lo que esa ciudad ha logrado ha sido con una recuperación hermosa, pero no tiene las bellezas que nosotros sí. La estrategia nuestra fue trabajar en dos sentidos: Recuperación, que es un poco más lenta porque son familias que llevan años allí y tienen un derecho adquirido porque durante ese tiempo sacaron un permiso. Afortunadamente estos procesos, mediante la concertación están dando buenos resultados. Falta, pero no es lo único, también hemos tenido que desarrollar proyectos importantes.
Afif Simán. El hecho de que hoy tengamos una plaza como San Roque permite que los visitantes puedan entrar a un sitio digno, llegar a la iglesia y conocer su pasado. Eso enriquece. Todas estas recuperaciones de espacio público fortalecen el tema patrimonial y lo convierten automáticamente en un destino turístico. Por ejemplo, cuando llegamos en 2012 uno no podía ni acercarse al caño de la Intendencia Fluvial. Eso porque el olor no dejaba, y hoy es una zona completamente transformada, no solamente por la plaza sino también por la recuperación de los caños.
Dina Luz Pardo. El comercio se convierte en esa población flotante de esta zona. Hay muchos que pasan más aquí que en su propia casa, es el lugar que viven como arte, es el que quieren y el que han visto cómo, a través de los años, se han dado pasos muy importantes para su recuperación; tanto a nivel patrimonial como en paisajismo. Pero seguimos a la espera de que la parte del control al espacio público tenga ese repunte, digamos que es el punto en el que sentimos que falta mucho por dar. Es la recomendación que hacemos, que al tiempo que de que se trabaje en proyectos, se necesita el tema del corto plazo de ejercer la autoridad en este sector, que creemos ha hecho falta. Porque ha pasado que cuando quitamos a un vendedor de un lado aparecen dos en otro.
Ramiro Castrillón. La preocupación de seguridad de ustedes es la misma nuestra, es la de estar aquí, acompañándolos y garantizando de que todos los que vienen al parque lo puedan hacer sin ningún contratiempo. En esta plaza San Roque hemos dispuesto un centro de información turística durante el tiempo que sea necesario para que las personas que quieran llegar al parque puedan hacerlo sin problemas. Tenemos vigilancia de auxiliares bachilleres y profesionales de Policía para que brinden la seguridad a las personas que llegan aquí y a sus alrededores. La Zona Cachacal se logró recuperar gracias al esfuerzo de la Policía y la Alcaldía. Pero no podemos bajar la guardia, necesitamos, con ustedes, fortalecer los frentes de seguridad y empresariales, y contribuir con la movilidad.
Ramón Vides. El Centro tuvo un desplazamiento en la década de los 70 y 80 por una serie de problemas que existían no solo de ocupación sino ambiental, que es un tema que ha influido. En el sector estaban las instituciones del Estado y los bancos, pero se fueron desplazando por problemas de espacio público. Lo que sí debemos resaltar es que en los últimos ocho años, donde se han utilizado unos mecanismos de recuperación y financiación, como la Valorización, se han logrado obras importantes. Hoy se está cumpliendo con la recuperación de los grandes ejes del Centro, que hacen parte del Plan Parcial. Esto se planeó con la compañía del Ministerio de Cultura, a raíz de la declaratoria de 1999. Así que estos proceso no son de mediano plazo, sino a largo. No es algo fácil, sobre todo en un país donde los problemas de invasión del espacio público son integrales, y están es asociados al desempleo. Pero estoy de acuerdo en que tiene que ser algo permanente, y los próximos mandatarios tiene que hacer lo mismo que en estos años. Como Cartagena, Barranquilla tiene un Centro que se puede convertir en atractivo turístico.
Diana Amaya Gil. Han sido más de 50.000 metros cuadrados nuevos de espacio público los que hemos creado con todos los proyectos ejecutados. Zonas que no existían. Además, se han recuperado sitios como Las Colmenas, donde habían más de 200 personas viviendo en condiciones infrahumanas, y las reubicamos. También hay casos la Bendición de Dios y el Corredor Portuario. Estas son obras donde, además de reubicar, devolvemos dignidad a las personas. Y es que estas zonas son puntos de acceso al Centro Histórico. En el tema de reubicación estamos frente a un problema de más de 50 años, con Administraciones que dieron una serie de permisos sin ningún tipo de control y que hoy nos vemos en la obligación de reubicarlos en predios como Casa Vargas, donde ahora están muchos libreros. Hay otros proyectos que estamos haciendo como los casos Volpe, Robertico y una serie de edificios que estaban totalmente destruidos. Esta ha sido una estrategia integral, donde nos falta mucho, pero ya estamos en marcha.
María Eugenia Castro. A través de la cultura es que conseguimos que estos espacios se hagan y se mantengan, luego, si hacemos todo un proceso con el vecindario. Me parece que darle el valor que tiene a la cultura. Creo que estar en el Centro Histórico es una oportunidad para el Museo del Caribe, igual va a ser ahora que iniciamos nuestra concesión para el Museo de Arte Moderno, para colaborar en todos los procesos que tenga la Alcaldía y Gobernación. Hay que apoyar todos esos proyectos que resulten para la mejora de este sector de la ciudad. Cuando recuperen San José y la zona de la Gobernación esto se va a conseguir otro punto de desarrollo para la ciudad. Debemos tener en cuenta que la cultura es el mejor vehículo para conseguir cualquier proyecto a corto, mediano y largo plazo. La construcción del Museo de Arte Moreno, en el parque del Caribe, pone a Barranquilla en el circuito de las magnificas exposiciones y eso hace que uno quiera también venir a esta capital. Hay muchas ciudades europeas que tienen a la cultura como gancho para atraer al turismo.
Mario Muvdi. Los hoteleros nos ponemos muy felices cada vez que vemos una obra de estas, porque embellecer la ciudad en muy importante, no solo por el Centro de Barranquilla sino por todo lo que se ha hecho. La carrera 51B es totalmente distinta ahora. Cada vez que vemos una intervención en el Centro se hace mucho más dinámica a la ciudad, ya no demoran en hacer restaurantes de alto nivel en el sector de la gastronomía. Van a empezar a recuperarse sitios que tengan historia, y la de esta ciudad existe en el Centro, como ocurre en la mayoría de las ciudades. En Cartagena el Centro estuvo abandonado, luego comenzaron a construir obras como el Centro de Convenciones, y miren lo que es ahora. Uno de los mejores hoteles del mundo está en ese sector de la capital de Bolívar. Esta es la gran oportunidad, hay que seguir recuperando espacios y mejorando parques. Para los hoteleros esto es fundamental, con la mayoría de los hoteles que están llegando tenemos que tener más atractivos. Desde este gremio nos sentimos muy complacidos y seguiremos apoyando estas iniciativas.
Rodolfo Zambrano. Me gusta mucho la tradición oral, que es muy importante. Por eso les voy a contar que la iglesia San Roque queda en la calle de las vacas (calle 30), y se llama así porque años atrás habían corridas de toros en este sector. Y hay que acordarse de que la iglesia nació como fruto de una promesa. A fines del siglo pasado hubo una peste del cólera en Colombia, unos marineros que vinieron de Colón (Panamá) la trajeron y la enfermedad dejó una cantidad de muertos. Por lo menos el 25 por ciento de la población de Cartagena falleció por ese virus. Y en Barranquilla también hubo unas cuantas personas fallecidas. Exactamente detrás de la iglesia estaba el cementerio del cólera. Aquí, en San Roque, se protegieron porque los vecinos hicieron una promesa de levantar un templo si no fallecía ninguno, y efectivamente su petición fue atendida y no pasó nada. Un padre del sector fue quien comenzó a recoger los fondos para ejecutar la obra.
Manuel Moreno. Esos 50 o 60 años de malas costumbres no se corrigen ni en cinco ni en diez, pero lo más importante de estos procesos, a pesar de esa sensación de recuperar y volver a perder, es no cesar en la constancia e insistir. Por ejemplo, hoy es emocionante estar en un lugar que es un nuevo espacio público. Esto es exótico, porque hay muy pocos casos similares en la ciudad, estas intervenciones tienen que continuar por décadas. Depende de la fuerza pública, la Administración Distrital y la comunidad, es algo muy difícil pero con constancia lo vamos a lograr. Podremos recuperar una zona que es un crimen haber dejado perder de esta forma.
