En el corredor universitario las leyes son pasadas por alto entre los conductores y peatones, quienes ignoran lo que las normas de transporte indican con tal de ajustar la circunstancia a su conveniencia.
Allí observamos a diario múltiples infracciones que van desde las personas que cruzan la carretera sin usar los puentes peatonales hasta motocarros circulando por la carrera 51B pese a las prohibiciones emitidas por la Alcaldía de Puerto Colombia.
A este grupo se suman los motociclistas que cruzan los separadores viales para cambiar de carril y conductores que emplean la bomba de gasolina ubicada al frente del cementerio Jardines del Recuerdo como atajo para tomar la vía al mar, sin importar que esto implique el tránsito en contra vía.
Sin embargo, quienes están al frente de vigilar y sancionar este tipo de faltas son solo nueve agentes de tránsito que laboran en Puerto Colombia.
Ellos tienen a cargo, como zona de control, la jurisdicción del municipio hasta el hiperpermercado Makro, ubicado en la carrera 51B con Circunvalar.
Estos hombres reparten la jornada en turnos de 8 horas de trabajo, por lo que es posible hallar, en una misma franja horaria, un máximo de tres hombres en los diferentes puntos de control.
'Por aquí casi nunca uno ve a esos agentes que se visten de azul', dice Roberto Pavola, trabajador del cementerio Jardines del Recuerdo. 'Hasta las ambulancias hacen esos cruces prohibidos. Todos aprovechan que eso está abierto y nadie lo sanciona', agrega.
En otros sectores del corredor, los motociclistas suben al separador para cambiar de carril.
Otra de las faltas más recurrentes son cometidas por los mototaxistas que recorren el sector, aunque una valla indique la prohibición que rige a este tipo de vehículos.
Todos son concientes de la restricción que desde el 30 de agosto de 2013 fue impuesta por el alcalde Carlos Altahona, a través del decreto 2013-08-30-001, la cual les limita su radio de operación a las calles del corregimiento La Playa, pero no la acatan.
La sanción establecida para quien incurra la norma es de 15 salarios mínimos diarios legales vigentes.
Quienes manejan este tipo de vehículo acostumbran a circular especialmente en la zona que corresponde a la Universidad del Atlántico y, los miércoles y domingos, transportan pasajeros hasta el coliseo del padre Holman Londoño.
'Uno sabe que existe la sanción, pero así es como ganamos el sustento de cada día', dice uno de los conductores de que puede llegar a transportar hasta cuatro personas en un mismo viaje a bordo de su carromoto.
Juan Carlos Muñoz, uno de los agentes de tránsito del municipio, asegura que varias veces ha sido amenazado con cuchillos y machetes mientras aplica sanciones a mototaxistas infractores. 'Es un grupo difícil de tratar. Uno teme por su seguridad', expresa.
El coordinador operativo del tránsito en Puerto Colombia, sargento Gustavo Ortega, reconoció que al grupo que coordina le hace falta ejercer control sobre zonas reconocidas como críticas. Lo anterior, lo justifica al afirmar que 'no podemos tener unidades permanentes en el sector, pues tenemos una grave falencia en el pie de fuerza'.
Señaló que una vez cese la Ley de Garantías, reforzarán el equipo con más personal y solicitarán apoyo de la Policía de Tránsito. 'Nos sentaremos a hablar con los líderes de los mototaxistas para llegar a un acuerdo', dijo.
Frente al tema de los cruces indebidos que se registran en la rotonda ubicada por el cementerio Jardines de la Eternidad, el sargento manifestó que está a la espera de una autorización por parte del alcalde Carlos Altahona para que sea ubicada una cámara que registre las infracciones.
'Queremos evitar que los agentes sean atacados en su integridad física y ejercer más control sobre este tipo de infracciones', puntualizó Ortega.