Mientras que el promedio de mujeres que mueren cada año en Colombia a causa de embarazos de alto riesgo es de 76 por cada 100.000 niños nacidos vivos —un índice que nos ubica en el cuarto puesto entre los países de América Latina con más mortalidad asociada al proceso de gestación—, el Distrito de Barranquilla no supera actualmente las 17 madres muertas anualmente por cada 100.000 niños nacidos vivos.
'De hecho, en 2013 solo hemos tenido tres muertes de este tipo', comentó la secretaria de Salud Distrital, Alma Solano, quien espera que cuando se computen los datos de las últimas vigencias el índice disminuya aún más.
Observó que Barranquilla ya ha cumplido de sobra con la Meta del Milenio que apunta a reducir este tipo de muertes a no más de 45 por cada 100.000 niños nacidos vivos.
Los datos sobre la mortalidad de mujeres gestantes a nivel nacional —apoyados por la Encuesta Nacional de Demografía y Salud (ENDS)— fueron suministrados por el obstetra Edgar Acuña, jefe del Departamento de Ginecología y Obstetricia del Hospital San José, de Bogotá, quien recordó que la tasa en Colombia es alta si se la compara con países como Chile o Uruguay, en donde no pasan de 30 por cada 100.000 mujeres fallecidas a causa de embarazos de alto riesgo.
'Se denomina embarazo de alto riesgo a una gestación en la que por causas fetales, causas maternas o por los dos motivos, el embarazo puede tener un desenlace anormal', comentó el galeno, explicando además que las enfermedades más comunes en una madre con embarazo de alto riesgo, son las relacionadas con los trastornos hipertensivos de la gestación, y las malformaciones congénitas.
La secretaria de Salud del distrito de Barranquilla, Alma Solano, recordó que también se debe incluir en la lista de alto riesgo a los embarazos prematuros o de adolescentes, ya que se trata de personas que aún no han completado su desarrollo físico en muchos casos, ni tampoco mental o intelectual, como para hacer frente con éxito a la responsabilidad que implica la maternidad. 'Y la prevención de estos embarazos es una asignatura pendiente. Las cifras están creciendo en todas las ciudades del país', observó.
Prevención y más prevención. La secretaria de Salud Distrital de Barranquilla explicó que la clave de esta drástica reducción (en la vigencia inmediatamente anterior el índice de madres muertas por embarazos de alto riesgo era de 39,5 por cada 100.000 niños nacidos vivos) se debe buscar en el trabajo preventivo que adelantan los llamados Vigilantes de la Salud.
Este cuerpo de funcionarios adscritos a la Secretaría de Salud se encarga de ir, barrio por barrio, detectando a las mujeres embarazadas, prestando atención domiciliaria pero también remitiendo y trasladando a las madres gestantes hasta las instituciones de salud conocidas como ‘caminos’, en donde reciben atención más completa y profesional.
La secretaria Solano expresó su orgullo por participar de una administración que ha conseguido darle un vuelco positivo al modelo de atención en salud, recordando que otras ciudades del país quieren reproducirlo.
El obstetra Edgar Acuña dijo, por último, que muchas muertes se podrían evitar si se vence la negativa tendencia de las mujeres colombianas embarazadas a evitar los controles prenatales. El 77% de ellas solo acude a control a partir del cuarto mes de embarazo.