Cada vez el panorama negativo se incrementa en La Guajira, en esta oportunidad la creciente del Rio Ranchería, no solo causó afectaciones a estructuras, sino que dejó varios cuadrúpedos muertos por inmersión.
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La denuncia fue realizada por la comunidad a través de las diferentes redes sociales, donde habitantes de los resguardos indígenas ubicados en la zona rural de Riohacha informaron el fallecimiento de más de 30 chivos.
Así mismo, residentes de la capital de La Guajira del sector céntrico como Barrio Arriba y Villa Fátima, expresaron que sus actividades cotidianas se vieron impedidas por inundaciones de la zona, que impide la movilidad terrestre.
Por su parte, la comunidad de Cucurumana, ubicada en a las afueras de la ciudad, manifestó la pérdida de los animales, lo que representa una afectación a la economía de toda una comunidad, donde el principal factor laboral, es la venta de la carne de este cuadrúpedo en el Distrito.
“Son más de 50 familias que dependen de esto, y del cultivo, hoy no tenemos materia prima para comercializar, la lluvia se lo ha llevado todo” expresó una líder del territorio ancestral.
Igualmente, la representante informó que varias personas han salido de la zona, ya que el nivel del agua es alto y se es imposible permanecer en sus casas, dejando la comodidad de su hogar y pertenencias.
“Necesitamos que también nos ayuden a nosotros, vemos que están llegando ayudas, pero todo se ha centrado en la Alta Guajira, acá en Riohacha también hay crisis” añadió la líder indígena.
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Cabe indicar, que estos chivos se encontraban en su habitad encercados en la comunidad, y al no contar con un medio de trasporte y no estar las vías de acceso en buen estado fue imposible su traslado.
La escena es aterradora, donde se ven los cadáveres de los animales quienes al parecer trataron de salir, pero el alambre de púas de la cerca no permitió que estos corrieran hacía otro lugar, quedando amontonados sus cuerpos sin vidas.
Al parecer, unos murieron por laceraciones con el cable y otros ahogados, y todos pretendían huir de la inundación producida por los fuertes aguaceros presentados en lo corrido de este año en el Departamento.