Eufredo Londoño, un campesino de 61 años residente del corregimiento de Porciosa en Albania, denunció el proceso presuntamente irregular, en donde policías lo despojaron de la carne de una res y un cerdo que había sacrificado en su finca, con el fin de venderlo y adquirir dinero para tratamiento médico de su esposa.
El campesino, propietario de un predio llamado El Paraíso, tiene cerca de 20 reses y una cría de cerdos, todos con los registros respectivos y las actas de vacunación del ICA.
'Todo lo hago legal como me enseñaron mis padres', indicó.
Según relata, el 26 de abril a las ocho de la mañana iba en una camioneta con la carne de una res que había sacrificado en su finca y un cerdo que también tenía vendido.
'Cuando estábamos a una cuadra del expendio donde tenía que entregar los animales, la patrulla motorizada se nos cruzó como buscando a cualquier bandido e inmediatamente fueron al sitio donde estaba la carne.'
Londoño asegura que no estaban acompañados de funcionarios del ICA ni de la Secretaria de Salud.
Sin embargo, el argumento para proceder con el decomiso fue que 'esa carne estaba decomisada por insalubridad'.