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Durante 40 días la odontóloga pediátrica guajira Yenirixsa Zambrano Benjumea vivió con el miedo a morir, después que fuera diagnosticada con COVID-19.

Estuvo todo ese tiempo aislada en su casa, sin tener contacto con nadie y mucho menos con su hija de doce años de edad, con quien vive en Basel-Landschaft, Suiza​, país al que llegó hace 30 años.

'Todo fue muy fuerte, desde el diagnóstico, hasta los síntomas, muchos de los cuales no fueron los ya conocidos y divulgados por los médicos', afirmó en diálogo con EL HERALDO.

Dice que todo comenzó con un ardor en la garganta y siguió con constantes dolores de cabeza, algo que nunca había sufrido. 'También me dio conjuntivitis, diarrea, disnea, falta de olfato, dolores musculares, articulares y hasta unas pequeñas espinillas me salieron en la cabeza', explicó.

La angustia también la acompañó durante ese tiempo, porque no quería contagiar a los vecinos del conjunto de apartamentos donde vive, la mayoría personas de la tercera edad a quienes conoce hace muchos años. 'Ellos son como mi familia y por eso estuve encerrada y cuando salía a la sala o al baño, había que desinfectar todo, usando guantes y tapabocas', indicó.

Yenirixsa agrega que sintió mucho temor porque sufre de asma y de hipertensión, morbilidades que podrían agravar su situación. 'Yo seguí todas las recomendaciones de los médicos, comer bien para subir las defensas, tomar mucho líquido, sobre todo té y estar alerta a cada síntoma que se presentaba', aseguró la doctora.

Durante ese tiempo consumió muchas verduras, frutas y té verde, de manzanilla, jengibre, cúrcuma, limón, canela, hizo gárgaras con agua de sal, limón, pero sobre todo mantuvo una higiene total y exhaustiva para evitar propagar la enfermedad.

El contagio de la odontóloga se produjo en su consultorio, a través de su auxiliar, aunque no se ha establecido dónde se contagió esta persona. 'Pudo ser con un paciente o en la calle, no sabemos aún', dice Yenirixsa, quien combatió la COVID-19, pero está aún recuperándose de algunos síntomas.

Para ella fue una sorpresa haberse contagiado, ya que en la clínica estatal donde labora, se han tomado todas las medidas necesarias y se han aplicado los protocolos exigidos. 'Los odontólogos atendemos solamente las urgencias porque es una obligación y por eso estaba trabajando, pero nos turnábamos y ahora se han incrementado las medidas', indicó.

Desde Suiza hizo un llamado tanto al gobierno nacional colombiano para que proteja al personal médico, como a los ciudadanos para que los respalden.

'Me han llegado videos de Colombia, en los que las personas han agredido a los médicos y enfermeras, lo cual es inaudito teniendo en cuenta que ellos son quienes nos pueden salvar de la pandemia', puntualizó.