En medio de clamor de justicia y demostraciones de profundo dolor e impotencia, fue sepultada en el Cementerio Central de Riohacha, la menor de dos años que fue asesinada durante un atraco en el barrio Las Tunas de Riohacha.
Dionisio Zambrano, abuelo materno de la niña, afirmó que se sentía muy afectado con este suceso tan cruel en el que perdió la vida su nieta. Añadió que 'Por un bendito teléfono, que no vale nada, vienen a apagarle la vida a un ser humano. Esto no es lógico'.
Además hizo un llamado a las autoridades para que hagan hasta lo imposible por encontrar a las personas involucradas en este hecho ocurrido el lunes en el que asesinaron a su nieta e hirieron a su yerno Johan David Rodríguez Vega.
Durante el sepelio también asistieron docentes y compañeros del CDI al que asistía la niña, y fueron enfáticos en pedir que se haga justicia por este caso que ha consternado a la población guajira.