De manera intempestiva el líder wayuu Javier Rojas Uriana peticionario de las medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos a favor de los niños wayuu de La Guajira, tuvo que salir de Manaure, donde se encontraba trabajando porque fue avisado de que lo iban a matar.
'Me encontraba haciendo los recorridos y verificaciones que a diario realizo en los municipios de Uribia y Manaure, cuando me avisaron y tuve que salir de inmediato', explicó.
Agregó que sus planes era pasar Navidad y Año Nuevo con su familia en Manaure, pero que ya estos cambiaron por las amenazas.
También indicó que 'los caciques políticos y contratistas de La Guajira ofrecieron 5 millones pesos para que atenten en contra mía'.
Rojas, quien ha dado a conocer las muertes de niños indígenas muertos por desnutrición en este departamento, denunció el hecho y dijo que aunque las amenazas comenzaron hace aproximadamente dos años, estas se han incrementado en la última semana, específicamente después de que dio a conocer la muerte de cinco menores el fin de semana pasado.
'Tuve información que había gente de la comunidad contratada para que atentaran contra mi vida, como para no despertar sospechas o decir que fue un problema entre clanes wayuu', dijo el líder, quien manifestó que no se detendrá en sus denuncias.
Rojas dice que el Estado le ha proporcionado dos escoltas y una camioneta para su protección.
Otra líder amenazada
El Movimiento Fuerza de Mujeres Wayuu - Sutsuin Jiyeyu Wayuu, en conjunto con el Resguardo Indígena Wayuu El Zahino de La Guajira, denunciaron amenazas en contra de la lideresa Jakeline Romero Epiayu, a través de mensajes que llegaron a su teléfono.
Según la denuncia, el hecho ocurrió durante la participación de líder wayuu en un grupo de trabajo con organizaciones indígenas, entidades del estado y la cooperación internacional en Cartagena en un dialogo Multisectorial sobre el derecho de la Consulta Previa.
'Los hechos, han sido puestos en conocimiento de la Fiscalía General de la Nación como entidad oficiales competente para adelantar las investigaciones pertinentes, sin embargo resulta preocupante el aumento de estos hechos hacia mujeres indígenas y líderes defensores de derechos humanos en el Sur de la Guajira', manifiestan los miembros de Fuerza de Mujeres Wayuu.
Explican que las amenazas han sido sistemáticas desde el año 2005 por parte de grupos paramilitares y amenazas directas en el 2012 a una de sus hermanas, Jazmín Romero Epiayu, también líder indígena y en el 2014 a su hija menor de edad Génesis Gutiérrez.
Las lideresas han participado activamente en la lucha que han llevado a cabo organizaciones sociales, indígenas y campesinas en La Guajira en contra del desvío del arroyo Bruno, por parte de Cerrejón.
'Es urgente tomar medidas frente a la vulnerabilidad a la que se encuentran expuestas las mujeres wayuu, líderes y lideresas de nuestro pueblo Indígena, por denunciar abiertamente en debates públicos, situaciones de vulneración de derechos que afectan al Pueblo Wayuu y a la madre tierra, la situación de las víctimas Wayuu del conflicto armado, las condiciones de empobrecimiento de las comunidades y la corrupción que afecta la niñez y las mujeres indígenas, situaciones que ponen en riesgo la vida y la integridad', manifestó el colectivo.
En La Guajira ya atentaron contra un líder wayuu
El pasado 3 de diciembre hacia las 6:30 de la tarde el líder del resguardo indígena wayuu Mayanbangloma de Fonseca Carlos Ramírez Uriana, fue víctima de un atentado en el que le propinaron tres disparos por parte de un sujeto que lo esperó afuera de su casa cuando regresaba de una reunión en otro resguardo.
