Familia, amistades y compañeros de trabajo y de universidad le dieron en la tarde de este domingo 13 de julio el último adiós al joven Juan David Ucros Cervantes, de 19 años de edad, la única víctima mortal que dejó un accidente de tránsito registrado el viernes anterior en la avenida Circunvalar, en un tramo del norte de Barranquilla.
Álvaro Ucros y Dinaris Cervantes, padres del joven, con sus corazones en duelo, invitaron a todos a acompañar a Juan David, a quien cariñosamente se le conocía como ‘Juanda’, hasta su última morada en un camposanto del vecino municipio de Soledad.
Previo a la inhumación, se llevó a cabo un acto litúrgico en la tradicional Iglesia San Antonio de Padua y luego hubo un recorrido hasta el cementerio.
Pero, sin duda, uno de los momentos más emotivos fue cuando el cortejo fúnebre se detuvo y, con aplausos, le rindió un tributo al joven estudiante de la Institución Universitaria de Barranquilla, IUB, que se había ganado su puesto de trabajo en una empresa llamada Kredit, a la cual había llegado como practicante en junio de 2024 y, por sus méritos, había quedado fijo.
Las lágrimas no se ocultaron. Los aplausos sonaron con fuerza. Pareció como si los adultos mayores y las personas jóvenes, algunos de negro y otros de blanco, pretendieran que ‘Juanda’ los escucharan.
El caso
En redes sociales aún circulan las imágenes que dejó el grave siniestro vial registrado hacia las 7:30 de la mañana del viernes 11 de julio en la Circunvalar, a la altura de la carrera 51B.
El joven Juan David acababa de bajarse de un bus y se dirigía hacia su lugar de trabajo, localizado en la carrera 24 No. 1A – 24, en el Edificio Bc Empresarial.
Según testigos, la víctima ya había a travesado el primer tramo de la vía, el que va de sentido sur-norte, y en la mitad del separador fue embestido por un carro Nissan, de placas FRS-569, que era conducido por el bombero de profesión Edwin Alberto Cataño Guevara. Como copiloto de ese vehículo iba Carlos Antonio Díaz Torres.
Otros usuarios de la vía señalaron que el conductor perdió el control del vehículo y colisionó primero contra un poste de alumbrado público, luego con una señal de tránsito, con un árbol y terminó atropellando a Ucros Cervantes, causándole la muerte en el lugar de los hechos.
Como ya es costumbre ante una situación de violencia, un accidente o en un acto de alteración, personas activaron cámaras de teléfonos celulares y, de esta manera, fue posible ver cómo sacaban del automotor a los dos hombres, pero también evidenciaron que en el mismo vehículo iban botellas de licor.
Cataño y Díaz fueron trasladados hasta la clínica Altos de San Vicente, también localizada en el norte de Barranquilla. En ese lapso las autoridades policiales manifestaron que el bombero probablemente tenía grados de alcohol en su sangre.
En ese sentido, EL HERALDO también conoció este domingo 13 de julio que Cataño Guevara permaneció retenido en la Estación Norte de la Policía Metropolitana de Barranquilla y este sábado habría sido presentado por la Fiscalía ante un juez de control de garantías, en medio de audiencias preliminares.
Al finalizar las diligencias, el bombero habría recobrado la libertad, pero continúa vinculado a un proceso, confirmó una fuente judicial.
