Abunda la tristeza entre los habitantes del barrio Santa Sofía, municipio de Sabanagrande, luego de que tres personas fueran asesinadas la noche del pasado sábado 18 de enero, a eso de las 11:30 de la noche.
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Sin embargo, para la familia de Samuel de Jesús Yepes Camacho, de 17 años de edad, no hay una explicación o respuesta válida del porqué fue asesinado el menor en medio de la atroz masacre perpetrada por unos desconocidos.
EL HERALDO dialogó con la madre del adolescente, Yina Paola Camacho, de 36 años de edad, quien reveló que en la mañana del sábado, Samuel de Jesús le había pedido permiso a su progenitora para asistir a una fiesta de una amiga que vivía por la casa junto con otros vecinos del barrio.
“Yo me había ido temprano para el trabajo, pasadas unas horas mi hijo me llamó al teléfono y me pidió permiso para asistir en la noche a una fiesta de una chica que vive por la casa, yo le di el permiso pero le dije que no se regresara tarde”, expresó Camacho.
Horas más tarde, luego de una extensa jornada laboral, Yina Camacho regresó a su hogar a bordo de un motocarro y en medio del recorrido alcanzó a observar a varias personas afuera de la casa donde se estaba realizando la fiesta, por lo que se tranquilizó.
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“Al terminar de trabajar, yo venía para la casa a eso de las 8:00 de la noche en un motocarro y pasé rápido por la casa de la fiesta, vi a varias personas pero no alcancé a verlo a él, yo estaba tranquila porque siempre en esa casa hacían fiestas”, afirmó.
Al llegar a casa, Yina Camacho había cenado con su hija y le dijo que esperaran al menor. Sin embargo la mujer se durmió a eso de las 10:00 p. m., hasta que fue despertada por la terrible noticia de que su hijo había sido asesinado.
“Yo me dormí a las 10 de la noche y me desperté una hora después, es ahí cuando observo el reloj y veo que era tarde y el niño todavía no había regresado a la casa, hasta que llegan unos vecinos y me dicen que a Samuel le habían disparado, enseguida salimos corriendo”, agregó.
La madre del adolescente le reveló a esta casa editorial que el atentado no se registró en la casa de la fiesta como anteriormente se creía, sino en una tienda.
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“Al llegar al lugar vi como mi hijo estaba en el piso ya muerto con varias heridas y sangre, no entiendo por qué el salió de la casa y fue hasta esa tienda”, explicó.
Este medio conoció que el joven se había graduado recientemente del bachillerato e iba ingresar al Sena, para próximamente estudiar Contaduría Pública en la universidad.
“Mi hijo se graduó de bachiller en diciembre, él iba ingresar ahora al Sena y me decía que después quería estudiar Contaduría Pública porque quería ser alguien en la vida, siempre fue un muchacho bueno, con excelentes notas, la gente ha llorado mucho su muerte, él no merecía morir así, nunca me imaginé recibir una noticia como estas”, expresó la progenitora.
