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Más de 10.000 días o específicamente 30 años tuvieron que pasar para que Jaime Saade Cormane volviera a pisar suelo barranquillero, luego de ser condenado por el asesinato de la barranquillera Nancy Mariana Mestre Vargas.

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A Barranquilla arribó este jueves en el vuelo comercial de Avianca AV 9528, proveniente de Bogotá, donde permaneció desde el mediodía. Allí fue puesto a disposición de la Policía Nacional, tras ser extraditado desde Brasil a primera hora. En la capital del país Saade realizó el respectivo proceso de migración, algunos chequeos médicos y fue notificado de su condena a 24 años de prisión por el delito de homicidio que es manejada por el Juzgado Primero de Ejecución de penas de Barranquilla.

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Ya en la capital del Atlántico, pasadas las 6:00 de la tarde de este jueves, y rodeado de una gran cantidad de agentes de la Interpol, el ingeniero de profesión fue montado en un vehículo que lo transportaría junto a un fuerte dispositivo de seguridad. Su mirada decía todas las palabras que su boca no pronunció. Así también, portaba un suéter de rayas y un jean algo desgastado que daba muestras de una larga jornada de traslados.

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Las manos de Jaime permanecían casi que inertes, aunque algo sudadas. Llevaba unas particulares esposas de color púrpura, que representan la justicia a favor de la mujer.