En diligencia desarrollada entre el 22 y 24 de agosto, el magistrado de la Sala de Conocimiento de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Barranquilla, Gustavo Roa Avendaño, volvió a tocar uno de esos espinosos temas del paramilitarismo al ordenar una compulsa de copias contra 40 personas señaladas por exparamilitares de haber ordenado homicidios e incidido en la desaparición y desplazamiento de pobladores de Pivijay, Medialuna y Salamina, en el departamento del Magdalena.
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El magistrado dejó sentada la reciente decisión en la continuación de la extensa lectura de la macro-sentencia condenatoria contra al menos 28 exintegrantes del Frente Pivijay del extinto Bloque Norte de las AUC.
Cabe recordar que el inicio de esta diligencia se llevó a cabo el pasado mes de febrero, con la revisión de los patrones de homicidio y el patrón de desplazamiento forzado.
Ahora EL HERALDO tuvo acceso nuevamente a las audiencias virtuales y a dicho documento en los que se volvieron a ventilar los crudos testimonios entregados en su momento por los postulados a la Ley de Justicia y Paz, pero ahora con algunos nombres que, según los propios exparas, no han rendido cuentas ante la justicia.
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Cuatro de esos nombres que los postulados citaron como 'los responsable del 90 % de los homicidios ocurridos en Pivijay, Magdalena, en todo el territorio del Frente Pivijay', fueron los de Saúl Alfonso Severini Caballero, Moisés Prieto, Jairo Pertúz y Jairo Pabón.
Así lo expuso el magistrado, para luego abrir paso a la lectura de algunos testimonios entregados por los exmiembros del extinto frente.
Uno de estos, de acuerdo con lo leído en la sentencia, se dio el 1 de agosto de 2012 del postulado Dany Daniel Velásquez, sobre un hecho cometido entre el sector de Medialuna y Pivijay el 10 de agosto de 2000 y en el que resultó como víctima fatal un hombre llamado Jorge Luis Tatis.
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'Nosotros teníamos un retén en la entrada de la finca La Colorada, y venia un bus al cual detenemos y bajamos a este muchacho, nos lo llevamos para los lados de la finca San Carlos, y se asesina y lo incineramos. Íbamos en una camioneta con el comandante Rafael, y la seguridad de él… No recuerdo quién lo asesina, pero lo matan con pistola, 2 o 3 tiros. Luego se incinera con llantas de vehículo, quedo en cenizas en el sitio donde se incineró'.
A ese caso se sumó el testimonio del postulado Miguel Ramón Posada, quien agrega que 'quien le da muerte soy yo con 2 impactos de pistola. Se lleva a una quebrada que está en la finca San Carlos, y se incinera, creo que lo incineró alias Candela. Yo di la orden que lo que quedara después de incinerado, lo tiraran a una quebrada. El motivo de este hecho es una información que nos pasó Saúl Severini, no recuerdo muy bien. Este señor trabajaba con Asoyuca y creo que Saúl dijo que estaba robando...'.
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