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Por:  Redacción Judiciales

Por el permanente asedio de organizaciones criminales como ‘los Costeños’ dos establecimientos comerciales de homo-interacción —es decir, lugares de esparcimiento y encuentro de personas con orientaciones sexuales, identidades y/o expresiones de género diversas— se han visto obligados a cerrar por las continuas extorsiones a la que se enfrentan.