La venta y consumo de sustancias alucinógenas dentro de la Universidad del Atlántico hoy está nuevamente en el radar de las autoridades, pues habría pasado de ser un minúsculo ‘narcomenudeo’, al que ya se le hacía seguimiento desde años atrás, a un consolidado negocio de venta ilegal de marihuana, cocaína y drogas sintéticas en el centro educativo, y a manos de expendedores ligados a estructuras o grupos criminales locales.