La víspera de Carnaval se apagó completamente para la familia Castellanos Pedroza. Los disfraces, la maicena y la espuma eran parte de la tradición familiar desde hace más de dos décadas, comenzando con Emil Castellanos, creador del disfraz conocido popularmente como ‘María Moñitos’, cabeza de la familia compuesta por ocho hijos.
Tras la muerte del patrono de la casa un primero de septiembre del 2000, uno de sus hijos heredó el característico personaje, el cual duró cuatro años vistiendo esa piel en todos los cuatro días que dura la festividad más grande del Atlántico.
Lamentablemente, Jesús Enrique Castellanos Pedroza, de 29 años, aquel niño que hace más de 18 años no volvió a tocar el emblemático disfraz por impedimento del Bienestar Familiar, murió este martes en medio de un accidente de tránsito en la Cordialidad, a la altura del municipio de Galapa.
'Eran las 11 de la noche cuando recibimos la llamada de un amigo de la familia, quien nos dijo que un bus de servicio especial había arrollado a Jesús, pero no nos dijo más nada, pero a mi otro hermano sí le dijo la verdad, que ‘Chulo’ estaba muerto', afirmó Analía Castellanos, hermana de la víctima, quien recordaba cada detalle de la vida junto a su hermano, desde aquel lugar donde crecieron juntos: la casa de su madre.
‘Chulo’, como llamaban de cariño a Jesús, se encontraba aproximadamente a 800 metros del peaje de Baranoa, ahí lo impactó el bus: 'Cuando nosotros llegamos nos dimos cuenta de que eso es demasiado oscuro, no hay iluminación, había dos carros alumbrando la escena del levantamiento', afirmó la hermana.