Llanto y abrazos que no lograban dar consuelo. Eso fue lo que vivieron los familiares de Margarita Gómez Márquez, la joven embarazada que fue asesinada y encontrada en una trocha del municipio de Galapa, durante su último adiós.
Con paso lento y sostenido los parientes de la joven de 25 años iban detrás del féretro que cargaban sobre sus hombres los familiares y amigos más cercanos. 'Hija te amo, hija te amo, me dejas un vacío grande, ¿por qué me la quitaron de esta forma?’’, se oía exclamar a Yaneth Márquez, mamá de la joven, en medio de la marcha fúnebre.
'Mi niña, Sarita (bebé), no me conociste, mi nieta cuanto te amo mi reina’’, decía la progenitora de Margarita frente al ataúd.