Abner Salas Colina, de 20 años, fue la víctima mortal de un ataque de sicarios que ocurrió la noche de este miércoles en el sector de ‘El Pradito’, ubicado en el barrio La Pradera, de Barranquilla.
El joven fue trasladado hasta el Camino El Pueblito, donde murió por la gravedad de los balazos que recibió en varias oportunidades. En este hecho, José Garay Tapia resultó lesionado y se encuentra fuera de peligro en el Hospital General de Barranquilla.
Este sábado los familiares de Salas Colinas llegaron hasta las dependencias de Medicina Legal para reclamar el cadáver de su pariente y sostuvieron que el crimen fue una equivocación.
'Una cámara de seguridad de una panadería registró el momento exacto del ataque, se ve cuando el sicario llega y le iba a dar al otro muchacho que iba con él, pero pensó que mi hijo tenía algo y fue que le disparó', afirmaron.
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Asimismo, detallaron que el joven laboraba como auxiliar de construcción y que había llegado de trabajar junto con su papá, pero que su primo lo fue a buscar para que lo acompañara a 'hacer un mandado'.
La noticia del atentado que sufrió Salas llegó por parte de la misma comunidad tras llevarlo de urgencias a un centro asistencial cercano.
'No nos han entregado el cuerpo porque están verificando las huellas. En nuestro país está todo en trámites', puntualizaron.
Los responsables de este ataque criminal, según aseguraron los testigos, huyeron en una motocicleta con rumbo desconocido.
