El ministro de Justicia, Wilson Ruiz, aseguró que luego de que el Gobierno nacional adelantara todos los trámites correspondientes para cumplir con el regreso del exjefe paramilitar Hernán Giraldo Serna, alias el Patrón, quien ya terminó de pagar su condena en los Estados Unidos por narcotráfico, este proceso fue aprobado.
Ruiz señaló en su cuenta de Twitter que 'gracias a la gestión adelantada por @MinjusticiaCo y @CancilleriaCol, autoridades de los Estados Unidos de América aprobaron deportación del exjefe de las autodefensas, Hernán Giraldo Serna. Será enviado en los próximos días para que responda por sus delitos en Colombia'.
'Giraldo tendrá que responder ante las autoridades judiciales de Colombia por los delitos de lesa humanidad y de las acciones delictivas cometidas mientras lideraba el Bloque Tayrona', aseguró el ministro.
La Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Barranquilla condenó al exjefe paramilitar por los delitos de homicidios selectivos, desapariciones forzadas, desplazamientos forzados, secuestros, amenazas y accesos carnales violentos contra personas protegidas.
El pasado 16 de diciembre de 2020, el Tribunal libró una orden de captura con notificación roja de la Interpol en contra de Giraldo Serna.
'Aunque el procesado lleva más de 8 años privado de su libertad por delitos relacionados con el conflicto armado, no ha delinquido, ha cumplido con los compromisos de verdad y entrega de bienes, (estos) no se acreditaron a través de los documentos apostillados y traducidos, por eso se le negó la libertad', dijo el Tribunal en el fallo emitido a mediados de diciembre del año pasado.
A finales de la década de los 60, la Sierra Nevada de Santa Marta, SNSM, sufre una fuerte ocupación por parte de colonos del interior del país, facilitándose su acceso, gracias a la recién denominada Troncal del Caribe, con gran número de caseríos alrededor de la vía.
En este escenario se produce a gran escala la explotación marimbera en un marco de desidia estatal y se produce la industrialización en la producción y exportación de grandes cantidades de marihuana hacia ciudades de los Estados Unidos.
Fue hasta 1985, año en que la creciente demanda de la cocaína hizo caer en decadencia el envío masivo de la marimba.
Esta dinámica económica fue semillero para que grupos armados de forasteros iniciaran un proceso de autodefensas campesinas en la región.
De aquí en adelante en esta región las pugnas por los negocios ilícitos y las diferencias personales entre los miembros de estas familias que pretendían demostrar poderío y control sobre las otras generarían una violencia sin precedentes, volviéndose usuales los homicidios en la Sierra Nevada de Santa Marta y en las poblaciones del pie de monte como Dibulla, Mingueo, Palomino, en La Guajira, y los caseríos que conforman el corregimiento de Guachaca, así como en el casco urbano del Distrito de Santa Marta.