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La estafa que dos sujetos vestidos de obreros cometieron contra varios habitantes del barrio Montecristo, en la localidad Norte-Centro Histórico de Barranquilla, quedó literalmente al desnudo cuando los afectados descubrieron el engaño y atraparon a los facinerosos.

'Esos tipos llegaron por aquí vestidos de obreros y diciendo que tenían unas pinturas finas para poder arreglar las viviendas ahora a fin de año. Los precios que daban eran muy bajos porque decían que eran pinturas de remate que les habían quedado de un trabajo que habían hecho', dijo un testigo en diálogo con EL HERALDO.

Varios vecinos del sector se animaron ante la ganga y adquirieron las latas con pintura. Cuentan los moradores que los sujetos se fueron del lugar con aproximadamente un millón 600 mil pesos producto de la venta.

Pero tan pronto los sujetos se fueron de la cuadra, uno de los compradores abrió su producto y descubrió que en el interior del pote no había pintura de calidad ‘1A’ sino agua con cal y jabón. Uno a uno, los vecinos que compraron las latas de supuesta pintura fueron cayendo en cuenta de que habían perdido la plata y que eran víctimas de una evidente nueva modalidad de estafa.

El rumor del robo se regó rápidamente y en las esquinas se comentaba lo ocurrido. Pero los sospechosos aparecieron nuevamente. 'Alguien los vio como a tres cuadras y avisó enseguida. Entre todos fueron a buscarlos y los agarraron', relató un morador del sector.

 Aseguraron los testigos que los dos hombres fueron encerrados en el patio de una vivienda del sector y uno de los estafados les quitó sus prendas de vestir.

'Ese señor estaba muy exaltado y les quitó casi que toda la ropa, después los desfiló por toda la calle para que la gente los viera y hacerlos pasar pena porque no le querían devolver la plata de las supuestas pinturas', añadió.

En el vídeo que ya es viral en redes sociales, se observa cómo los dos hombres de quienes se desconoce su identidad caminan desnudos por la calle, mientras que vecinos del sector los agreden con todo tipo de elementos. 

 'A ellos se les dijo que devolvieran la plata o si no se iban desnudos para la calle, pero prefirieron salir ‘boleteados’', sostuvo una mujer en medio de risas.

Hasta el sitio llegaron uniformados de la Policía Metropolitana de Barranquilla quienes evitaron que la comunidad siguiera agrediéndolos físicamente y conducirlos a un sitio seguro en espera de que alguien los denunciara formalmente. La Policía insistió a la comunidad en que no se debe tomar justicia por mano propia, pues existen los conductos regulares y la normatividad que se debe seguir para cualquier caso.