Para Carlos Bello Jiménez, el homicidio de la madre de sus hijos es algo 'muy extraño'. Desde que su hijo menor le tocó la puerta de su habitación gritando que algo le había ocurrido a Madeleine Montes Castillo, el hombre empezó a sopesar todas las razones por las que pudieron haber atentado contra su vida.
'Hay gente que está diciendo que fue extorsión, pero si la hubiesen amenazado ella nos dice. Tampoco fue atraco porque ella quedó con la plata en la mano. No tenía problemas. Eso fue por envidia o por algún tema sentimental. Ahora mismo cualquiera mata por $100.000. La vida de uno no vale nada', pensó en voz alta Bello Jiménez.
Según explicó el hombre a EL HERALDO, el éxito de su expareja y socia en el estadero Black & White pudo haber sido un detonador del ataque. De hecho, recordó que al momento del homicidio Madeleine estaba en el local tratando de explicarle a un empleado cómo quería que pintaran el letrero.
'Ella estaba aquí sentada con la muchacha con la que vive, cuando llegó el tipo a matarla. Como a dos metros le dispara. Un tiro en la cabeza, otro en el pecho y más', apuntó el hombre, indicando que los tiros fueron hechos a tan corta distancia que quedaron orificios de bala en la pared de la fachada del restaurante.
Así mismo, aseguró que la teoría de que el homicidio corresponde a un asunto personal es apenas una vaga hipótesis, pues él y sus hijos no saben bien por qué fue que ocurrió el crimen.
'Nosotros estamos gringos con eso. Si hubiera sido amenaza, ella nos dice. Si hubiera sido extorsión, ella nos dice. Nosotros somos unidos, pero ella nunca dijo nada. Nosotros estamos pensando que es como envidia, porque parece mentira, pero la gente habla y se pueden juntar dos o tres a decir ‘vamos a quitar a esa vieja del medio’', afirmó Bello Jiménez.
Por otro lado, dijo que no tenía conocimiento de que Madeleine Montes hubiese estado siendo víctima de extorsión en la actualidad, pero que alrededor de cinco años atrás sí había recibido llamadas extorsivas.
En ese entonces, contó, no se hicieron los pagos de las extorsiones, sino que de inmediato contactaron a la Policía para hacer seguimiento a las llamadas, las cuales identificaron que venían de Valledupar y hubo una captura en su momento.