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En delicadas condiciones de salud resultaron una mujer de 23 años y su pequeño hijo de dos años, tras haber sido arrollados por un taxi en la tarde de este martes en el barrio San Roque de Barranquilla. 

El siniestro quedó registrado en un impresionante video de cámaras de seguridad, en el cual se ve a la mujer caminando con el menor por la calle 35 con carrera 33 del mencionado barrio.

A la 1:29 de la tarde, madre e hijo pasaban frente a un portón, caminando sobre la acera, donde se encontraba un carro parqueado. Para continuar con su camino, se propusieron rodear el vehículo, lo que les hizo caminar por la calle, no contando con que en ese preciso momento un taxi pasaba a toda velocidad justo por el tramo de la calle que ellos acababan de tomar.

El vehículo Hyundai amarillo de placas WFZ 948 se desplazó varios metros llevando a la mujer sobre el capó del carro, mientras ella sostenía de la mano al pequeño. Pronto, el niño se suelta y cae al suelo perdiendo la conciencia en el acto. La madre, segundos después, también cae, pero frente al taxi y sin que este se detenga.

Ambas víctimas quedaron gravemente heridas, con múltiples fracturas y contusiones, tendidos sobre la calle, separados por varios metros de distancia. Habitantes del sector, alarmados por lo que acababan de ver, salieron corriendo de sus casas para socorrer al menor y a su madre, por lo que llamaron a una ambulancia y a la Policía de inmediato.

Los heridos fueron trasladados al Hospital Barranquilla, desde donde los remitieron al Camino Adela de Char. 

Desde allí, un familiar de las víctimas dijo que 'el niño está muy delicado de salud', ya que presenta graves heridas en la cabeza y hemorragias internas.

Sobre la joven madre aseguró que se encuentra estable y en recuperación.

Ante un juez

La Policía detuvo al conductor del taxi, identificado como Rubén Darío Rúa Pérez, de 56 años, y lo dejó en manos de la Fiscalía para que se iniciara un proceso legal y una investigación por las causas del accidente.

De acuerdo con el abogado Jorge Urbina, quien asumió la representación de las dos víctimas en el proceso judicial, el taxista fue llevado a audiencias preliminares este miércoles y se le imputó el delito de 'homicidio en grado de tentativa de manera culposa', pues quedaron comprometidos órganos vitales de las víctimas.

'Hasta ahora se ha tomado como un accidente. No se ha demostrado un dolo en los hechos que aún son materia de investigación, pero el dolo implica que haya una preparación previa para el crimen, y no parece así', explicó Urbina. 

También dijo que el siguiente paso es comprobar si el conductor estaba bajo el efecto de sustancias psicoactivas o tenía algún grado de alicoramaniento. 

'La reacción del conductor fue irse a la fuga. El papá del niño trató de perseguirlo y detenerlo y el siguió aún teniendo el vehículo vuelto nada', indicó el abogado. 

Tras las audiencias preliminares, el taxista quedó en libertad porque no tenía antecedentes, pero continúa vinculado al proceso y con restricciones de salida del país mientras avanzan las investigaciones.