La noche del pasado sábado, cuatro hombres armados llegaron hasta la sede de un supermercado en el barrio Los Olivos, para cometer un hurto. Dos de los delincuentes irrumpieron en el lugar, mientras los otros dos aguardaban, en las afueras del establecimiento, con las motos encendidas y en posición de huida.
Usando tapabocas, los dos hombres que entraron al local encañonaron al vigilante, a la administradora y al personal de las cajas registradoras, y se llevaron consigo el dinero. El monto no fue revelado por las autoridades.
Episodios como el ocurrido en el supermercado, han tenido un incremento las últimas semanas, de acuerdo con los reportes que ha conocido este medio por parte de las víctimas, pero los casos se registran en comercios menores, como tiendas y fruterías. Los casos se han registrado en barrios como San José, El Carmen, San Isidro, San Roque, Rosario, Cevillar y Las Nieves.
'La Policía dice que ha bajado los hurtos, pero lo será en el norte de la ciudad. Acá en el sur eso ha seguido igual. Los bandidos por acá no han cesado en su criminalidad', dijo una habitante del barrio San José.
La situación coincide con lo señalado por el abogado penalista, expersonero de Barranquilla y experto en seguridad, Arturo García Medrano, quien asegura que a diario se mantiene en comunicación con líderes vecinales y que le comentan 'que el crimen sigue igual'.
'Los hurtos se mantienen en el nivel callejero, pero se han ido trasladando a los alrededores de las entidades bancarias y supermercados. La Policía habla de una disminución, pero esas estadísticas se deben a que la gente poco se está movilizando a reportar los atracos', apuntó.
El expersonero señaló que en la ciudad hay 'zonas desprotegidas' porque hay otras prioritarias. 'La capacidad institucional de la fuerza pública está orientada a unos determinados procesos y no hay de pronto el pie de fuerza para atender los temas de riesgos', dijo.
Le también: Delincuentes armados roban supermercado en Los Olivos
Otra modalidad
Este medio también conoció de atracos y robos que se están llevando a cabo en las calles de la ciudad bajo la modalidad de raponeo, técnica que usaba para robar celulares y bolsos, pero en esta oportunidad los ladrones se llevan las compras.
'Hace días caminaba por la (calle) Murillo, entre carreras 3B y 4 ,con dos bolsas y el parrillero de una moto me arrancó una de las bolsas. Ni siquiera sabía que llevaba allí, solo la arrebató y ya', dijo Gloria Martínez habitante del sector.
La mujer, quien reside en el barrio Carrizal, contó que varias personas se percataron de la situación y le indicaron que ese episodio ya lo habían visto en tres oportunidades en esa misma zona, en menos de dos días.
De acuerdo con las cifras de la Mebar, el hurto a personas se había reducido en un 78% con 148 atracos registrados a lo largo de la primera parte de la cuarentena, (desde el 25 de marzo al 11 de abril); es decir, en 518 menos en comparación con los 666 casos registrados en el mismo periodo de 2019.
El hurto en otras modalidades también se redujo en importantes cantidades: el hurto a residencias bajó un 54% (de 50 casos en 2019 a 23 casos en 2020), y el robo de celulares bajó un 77% (de 319 casos en 2019 a 73 casos en 2020). Sin embargo, el hurto a entidades comerciales fue el que más se redujo con una variación del 91% al comparar los 12 casos que se registraron a lo largo de la primera cuarentena, con los 134 que registró la entidad en el mismo periodo de 2019.