Conducir después de tomarse un par de cervezas durante este carnaval le puede dejar un tremendo dolor de cabeza. No por el guayabo del día después, sino porque puede terminar pagando hasta $42 millones si lo encuentran al volante con alcohol en su cuerpo.
Tal irresponsabilidad vial se ha convertido en uno de los grandes temores para aquellos que salen a las calles a festejar las carnestolendas, pues no es extraño encontrarse con incidentes –unos más graves que otros– generados por combinar el alcohol y los motores.
Es por eso que con el objetivo de reducir la accidentalidad y dar tranquilidad a locales y turistas que por estos días se encuentran en Barranquilla las autoridades han aumentado la presencia en las calles, haciendo controles que dejan algunos resultados, entre ellos el aumento de los vehículos inmovilizados porque sus conductores registraron algún grado de alcohol.
EL HERALDO conoció que en lo corrido de este año se han inmovilizado 163 vehículos por alcoholemia, lo cual representa un incremento del 30% en comparación con los 125 que fueron inmovilizados en la misma época, pero de 2019; y eso que aún el Carnaval 2020 no ha comenzado en firme.
De hecho, fue el alcohol el que dio pie para que se generara un curioso –y molesto para algunos– accidente en el que estuvo involucrado el conductor de una Dacia, un policía y una transeúnte.
El hecho ocurrió en la mañana de este martes cuando un patrullero de la Policía decidió inmovilizar el vehículo dedicado al transporte ilegal de pasajeros, debido a que su conductor, al parecer, tenía grado dos de embriaguez.
Inesperadamente, cuando el policía arrancó el vehículo para conducirlo a los patios, atropelló sin querer a una mujer.