La familia de Madelyane Ortega entregó a la Fiscalía el celular Huawei P20 que usaba la joven hasta el día que fue hallada muerta, el 18 de diciembre pasado, dentro de las instalaciones de la Universidad del Atlántico, sede centro.
El dispositivo, según el ente investigador, fue enviado a Bogotá para que sea desbloqueado. 'Nadie sabía la clave y es difícil activarlo desde acá, es por ello que tuvo que ser enviado a la capital de la república para allá se haga todo el trabajo respectivo', dijo un investigador a este medio.
La fuente precisó que desconoce el tiempo en que pueda tardar el desbloqueo del equipo. 'Podría tardar mínimo un mes'. En el celular, los forenses pasarían a analizar los mensajes de textos, llamadas y demás contenidos que puedan servir como material probatorio dentro de la investigación.
'Dentro de todo este proceso se está cumpliendo una agenda. Ya solicitó la ayuda de un arquitecto y tipógrafo forense para la reconstrucción en 3D de la escama del crimen, pero en el país solo hay un experto en estos temas. Esperamos que se desarrolle dentro de lo más pronto posible', dijo la fuente.
Este último proceso podría demorar otro por lo menos 'unos dos meses como mínimo'.
Hace un par de semanas la Fiscalía Seccional Atlántico anunció la realización de la autopsia psicológica a Madelayne, para conocer su estado emocional antes de su muerte. Es por ello que Medicina Legal necesita realizar entrevistas a las personas más cercanas en la vida de la joven.
Es por ello que el instituto requiere la comparecencia de la madre de la joven, Karen Sofía Villa. Sin embargo, en días pasados la mujer se pronunció y aseguró que se abstendría de hablar ante las autoridades hasta no obtener un informe completo de Medicina Legal.
'No he querido conversar porque nada de lo que haga me va a devolver a mi hija, solo por decir que tengo la plena seguridad de que Made no se suicidó y que no pienso decir una sola palabra hasta que Medicina Legal no se digne a dar el informe final, ya lo había conversado con Guillermo Santrichk, funcionario del CTI', escribió la madre en su cuenta de Twitter en la madrugada del pasado lunes, refiriéndose a la necropsia realizada a la menor.
Villa también que los profesionales debían dictaminar 'si ese tipo de caída daba para eso, (y) cuanto tiempo transcurrió para que fuera trasladada a una clínica que estaba a dos pasos de la universidad', puesto que aún hay dudas sobre las condiciones del fallecimiento de la adolescente de 17 años estudiante de Derecho en la Universidad del Atlántico.