Una vez se llevó a cabo este viernes la identificación de Luis Alberto Cantillo Orozco y de su pareja Bileidis Yoselin Meza en las instalaciones de la URI, ambos sospechosos del múltiple crimen de Las Terrazas tuvieron un encuentro con abogados y autoridades, entre estas policías judiciales y delegados de la Fiscalía.
En medio de entrevistas, los dos capturados volvieron mencionar lo que le habían dicho a los medios de comunicación sobre su actuación en la masacre y además narraron cómo, supuestamente, fueron usados por los verdaderos homicidas.
'La noche del asesinato llegaron los dos hijos del vecino (no especifica) y el veterinario del señor de al lado (tampoco especifica), esa noche ladraron los perros, y yo dije, ese tiene que ser el señor Enrique que está caminando con el revólver por ahí, porque él se paraba a la hora que sea con el arma', explicó el capturado Luis Alberto Orozco Cantillo sobre un pasaje previo a la masacre ocurrida el 2 de febrero.
Seguido, el hombre dijo: 'Cuando yo me asomo a ver quién está por ahí, me salen ellos y me dicen ¡quieto!, no vayas a decir nada y ni hagas bulla, lo único que quiero es saber cómo hacemos para que el viejo salga… Yo les dije, la verdad es que yo podía hacerlo salir y lo llamé: señor Enrique hágame el favor y salga que necesito hablar con usted', confesó Orozco Cantillo y agregó 'Cuando él sale (Jaime Enrique Herrán), su esposa sale y ellos encañonan es a la mujer que viene atrás de él'.
'El señor Jaime hace como si fuera a sacar su revolver del pantalón pero no lo tenía consigo; Si el señor Enrique ese día sale con el revólver, él los mata primero porque ellos tenían encañonada a la señora', explicó Orozco Cantillo.
En el hecho murieron el ingeniero Jaime Enrique Herrán Oviedo, su esposa Griselda Acevedo Ospina, su cuñada Betzaida Acevedo Ospina y su familiar Sandra Ricardo Montes.
La Masacre
'Yo dije ¡no le hagan nada al señor Enrique, no le hagan nada¡…; el veterinario del vecino me dijo: así como tú haces, que te traes la gente aquí para amarrárselos a ellos, ahora nosotros necesitamos que tú lo agarres que le vamos a hacer lo mismo', explicó el capturado y siguió: '¡Ay mi hermano enseguida y lo degollaron; yo lo agarré y lo abrazaba y le decía señor Enrique no te mueras, señor Enrique no y no! y yo lo cargaba y lo tiraba… Entonces tenían a las mujeres adentro de la casa, salió la señora, la prima, hicieron bulla en el patio y los perros ladrando y los hombres dijeron que las metieran adentro que la gente se va a dar de cuenta', manifestó el hombre su versión sobre la muerte del ingeniero Jaime Enrique Herrán Oviedo.
'Cuando nosotros estamos en ese bololó, uno de ellos saca una escopeta, yo agarraba al señor Enrique y le pegaba por la cara', continuó Luis Alberto su relato.
'Ya cuando los otros entraron en el cuarto con las mujeres ya todo eso estaba desarbolia’o (revolcado), entonces ellos me dijeron agarra aquí y esta caja pónmela acá, jala esta caja aquí pon esto acá, me pusieron a marcar todo, estaban con guantes y sus máscaras', explicó el capturado sobre lo que le habrían ordenado los supuestos asesinos.
Este luego le continuó: 'la esposa del señor Enrique me decía: Luis tú no eres capaz, ¿Qué pasó?; y yo le dije señora Betzy cállese la boca que nos van matar, entonces ella dijo: ‘Luis tú no tienes corazón para hacer lo que ellos te digan, no les sigas las aguas a ellos, que se lleven todo pero plata no tenemos’, dijo ella'.
'Ella me preguntó que qué era lo que le habían hecho al señor Enrique, yo dije que desgraciadamente lo mataron, cuando yo les dije eso a las mujeres, los hombres dijeron ‘A estas malditas también hay que matarlas’; y cuando a la señora Gricy (Griselda) la degollaron, las otras se desmayaron'. Dijo el hombre sobre la muerte de las tres mujeres.
Orozco Cantillo también narra a los presentes en la sala de interrogatorios que los presuntos asesinos le ordenaron amarrar a Betzaida Acevedo y a Sandra Ricardo; 'ellos me dijeron amárralas, yo las amarré, cuando yo les dije que al señor Enrique lo habían matado, enseguida, ahí mismo las asesinaron'. Puntualizó el interrogado sobre el crimen.
'Cuando ellos hacen eso, me dicen, recoge todo y vete, me pasan unos sacos, en los dos sacos hay huellas del veterinario que mató al señor Enrique… cuando estoy recogiendo vienen y me dicen no recojas nada, agarra tus pelaos y vete, y la ropa que tienes puesta te la quitas y te vas enseguida', explicó el hombre que señaló que habló con una vecina y le explicó que lo habían sacado pero no podía explicar los motivos del hecho.