La audiencia que se iba a llevar a cabo este lunes contra tres de los involucrados por los atentados terroristas de comienzo de año en la Estación San José y el CAI de Soledad 2000 terminó suspendida antes de dar inicio por falta de los abogados de los capturados.
El juez Primero Penal del Circuito, Jorge Torregrosa, dejó sentado por escrito y grabado en audio que a su despacho nunca llegó la notificación de los cambios de abogados de los capturados Nilson Mier Vargas y Dalila María Duarte Martínez, pareja que cayó junto a Cristian Camilo Bellón Galindo.
Mier y Duarte fueron trasladados desde sus centros carcelarios por guardianes del Inpec y custodios del Buen Pastor para la diligencia que se debía hacer ayer sobre la presentación del escrito de acusación, pero al llegar a la sala del Centro de Servicios Judiciales de Barranquilla ambos manifestaron que habían cambiado de abogados de oficio a contractuales.
Ante ese mensaje, el juez manifestó en sala que no tenía conocimiento de esa decisión, por eso no se habían notificado a los nuevos abogados.
'El juzgado deja constancia en audio que nunca fue avisado del cambio de abogados... y por eso no los notificaron', precisó el togado ante la audiencia y ante la Fiscalía, en este caso representada por el exdirector seccional de Fiscalías, Wilder Guerra Millán.
Nilson Mier y Dalila Duarte fueron detenidos por su presunta participación en los atentados en los que murieron seis policías y dejaron más de 40 heridos.
Sobre Bellón Galindo, quien fue señalado por las autoridades como autor material de la detonación de 2 bombas a la estación de Policía del barrio San José, el 27 de enero; su defensa técnica manifestó que su protegido renunció a su derecho de asistir a las diligencias judiciales por lo que su presentación se haría de manera virtual.
A los procesados, la Fiscalía les imputó cargos en audiencias preliminares llevadas a cabo en febrero, los delitos de homicidio agravado en concurso homogéneo sucesivo; tentativa de homicidio agravado en concurso homogéneo sucesivo; terrorismo agravado; fabricación, tráfico y porte de armas de uso privativo de las Fuerzas Armadas y explosivos; utilización ilícita de redes de comunicaciones y maltrato animal agravado.
Por este hecho que fue señalado por las autoridades como el peor ataque terrorista ocurrido en Barranquilla en los últimos años, se encuentra fugitivo Jefferson Torres Mina, individualizado por las autoridades luego de aparecer en imágenes de cámaras de seguridad en compañía de Bellón Galindo.
Días previos al ataque presuntamente realizaron inteligencia en la URI de la Fiscalía y varias dependencias policiales, entre ellas el Comando de la Policía Metropolitana. En audiencias preliminares el fiscal del caso señaló que este último habría escapado en un bus intermunicipal hacia Cúcuta con destino a Venezuela, donde se presume que aún se encuentra huyendo del cerco de las autoridades.
