Diez muertes violentas se registraron entre el pasado viernes y la mañana de este lunes en el área metropolitana de Barranquilla. Ocho de los casos corresponden a homicidios (seis con arma de fuego y dos con arma blanca), mientras que los otros dos fueron un accidente de tránsito y un electrocutado.
Los tres casos más recientes ocurrieron en menos de 10 horas y fueron asesinatos perpetrados a bala.
Uno de los últimos hechos se presentó en la calle 8 con carrera 35B, barrio Rebolo, en la capital del Atlántico, donde resultó baleado un hombre identificado como Harry Luis Fuentes Racine.
De acuerdo con el reporte de la Policía Metropolitana de Barranquilla, ciudadanos llamaron al CAI Cervecería para reportar que un hombre estaba tendido en la vía. Uniformados se trasladaron hasta el lugar y, en efecto, se toparon con el cuerpo sin vida de Fuentes Racine.
Menor de edad
En otro hecho –que tuvo lugar en la calle 17 con carrera 18, barrio Villa Esperanza (Soledad)– perdió la vida un adolescente de 17 años, quien recibió un balazo en la cabeza, falleciendo de manera inmediata en el lugar.
Al parecer, el menor llegó hasta ese sitio 'para comprar estupefacientes', cuando un hombre lo abordó, sacó un arma, obligó a la víctima a que se arrodillara, le dispara y luego huye.
En Santa María
El tercero de los últimos casos se registró, aproximadamente, a las 8:30 de la noche de este domingo, en la calle 99B con carrera 1 Sur, barrio Santa María.
Alexander Inciso López, de 52 años, falleció tras recibir cuatro impactos de bala: en el hombro derecho, en el tórax, en el pómulo y en un brazo.
Según algunas versiones recopiladas por la Policía, la víctima se encontraba departiendo con otras personas en una tienda ubicada en dicho sector, cuando fue abordado por un hombre que se movilizaba en moto, quien desenfundó un arma de fuego y, sin mediar palabra, lo atacó.
El homicida, quien huyó tras cometer el crimen, 'vestía una camiseta blanca y la moto en la que se transportaba era negra y marcha Honda Splendor'.
Inciso López fue trasladado al PASO Santa María, donde falleció cuando recibía atención médica.
Las autoridades adelantan investigaciones para determinar los móviles de los tres crímenes y dar con el paradero de los responsables.
Las otras siete muertes
Entre los otros siete hechos está la muerte de un trabajador de una estación de gasolina, identificado como Luis Alfredo Silva, quien el viernes fue arrollado por una camioneta cuando se movilizaba en bicicleta por la carrera 53 con calle 43, en Barranquilla.
Al parecer, el conductor del vehículo se quedó dormido cuando iba al volante, lo que habría ocasionado que embistiera a la víctima.
El sábado fueron cuatro homicidios
Cuatro fueron los homicidios que se registraron el sábado, dos de ellos se presentaron en el barrio Las Malvinas, en Barranquilla: uno dejó como víctima a Édgar Rincón Medina, de 35 años, desmovilizado de las Farc, quien era conocido con el alias de Cucharo y fue ultimado de 11 balazos en la carrera 7C con calle 88.
El otro caso presentado en ese barrio de la capital del Atlántico corresponde a un hombre, aún sin identificar, que fue hallado en una trocha con heridas de arma blanca. Según las autoridades, el hecho podría ser por ajustes de cuentas.
Otros dos hechos aislados se presentaron el municipio de Soledad, donde perdieron la vida Nilson Rafael Gutiérrez Amaya, de 24 años, quien fue apuñalado, y Yair Sandoval Llanos, de 36, ultimado a bala.
Según las versiones recopiladas sobre esos dos casos, Gutiérrez Amaya fue asesinado por oponerse a que le robaran la moto, mientras que Sandoval Llanos fue baleado por alias Peluche, cuando se encontraba en un billar.
‘Marañero’ electrocutado
Como Roger Hernández Castro, de 38 años, fue identificado el hombre que murió este domingo al sufrir una descarga eléctrica, cuando se subió a un poste de luz para intentar reparar un daño había dejado sin luz a un sector del barrio Las Américas.
Otro de los casos violentos de este domingo fue el asesinato de Rosnel Joandris Cabarcas Caballero, de 28 años, quien recibió dos disparos cuando se encontraba en un taller del barrio Por fin, donde le arreglaban su moto.