El concejal de Barranquilla por el Partido Conservador, Rubén Marino Borge, se defendió de las acusaciones por violencia intrafamiliar que contra él hizo su esposa Clara Inés Acosta Yepes, ante la Fiscalía y los diferentes medios de comunicación de la ciudad.
En diálogo con EL HERALDO, el cabildante dijo que contra él se estaba organizando un concierto para delinquir para despojarlo de sus bienes.
'Yo la tengo denunciada en la Fiscalía por frause procesal, violencia intrafamiliar y ejercicio arbitrario de la custodia de hijo menor de edad porque sacó a mis hijos del colegio para llevárselos para Medellín, sin importale que la Comisaría Décima dio una orden que ni ella ni yo podíamos sacar a los niños de la ciudad', dijo el concejal.
Según Marino Borge, Clara Inés Acosta Yepes ha tratado de dañar su imagen y su reputación ante la sociedad barranquilla y el país, confabulándose mediante mentiras para estafarlo.
'Aquí se estaba fraguando un concierto para delinquir para quitarme lo mío, las cosas que he adquirido con mi trabajo de hace 38 años, todo esto es un montaje con el que quieren solamente lucrarse económicamente', señaló Marino.
El cabildante indicó que inició un proceso de divorcio para separarse legalmente de Clara Acosta, pero que lo que importa en este momento son sus hijos menores de edad.
'Ciento por ciento velo por mis hijos y mi casa, gracias a Dios nunca les ha faltado nada, lo peor que han hecho es que se los llevaron escondidos y ya son más de 50 días que no sé nada de ellos; los voy a buscar inmediatamente porque mis hijos están primero que todo el mundo', se pronunció el concejal Rubén Marino Borge, quien finalmente negó haber agredido a su esposa, de la que dijo que el video que mostró a los medios de comunicación 'está editado'.
