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El cuerpo de Héctor Jaime Beltrán, un mesero que murió durante la toma y la retoma del Palacio de Justicia en noviembre de 1985, está enterrado en Barranquilla bajo otro nombre, según logro establecer este viernes EL HERALDO con fuentes de Medicinal Legal.

Beltrán, nacido en Sahagún (Córdoba), laboraba en la cafetería del Palacio cuando fue tomado violentamente por guerrilleros del M-19 y posteriormente fue retomado a sangre y fuego por el Ejército.

El día de los hechos, Beltrán tenía 28 años y llevaba cinco años de matrimonio con Pilar Navarrete. Era el mayor de seis hermanos y trabajaba de mesero mientras conseguía un trabajo en lo que había estudiado: técnico en refrigeración comercial. También era padre, en ese entonces, de cuatro pequeñas de siete meses, dos, tres y cinco años.

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Este caso de irregularidades por parte de las autoridades en la entrega de los cuerpos del caso del Palacio Justicia, se suma al de las víctimas Cristina Guarín, Ana Rosa Castiblanco, Luz Mary Portela y Lucy Amparo Ovieedo.

Condena de la CIDH por este caso

Al hallar que hubo un 'modus operandi tendiente a la desaparición forzada de personas consideradas como sospechosas' por parte de la fuerza pública en la retoma del Palacio de Justicia, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó al Estado.

Adicionalmente, le ordenó investigar y sancionar a los responsables, buscar a los desaparecidos y pedir perdón públicamente por lo ocurrido.

'La Corte consideró demostrado que existió un modus operandi tendiente a la desaparición forzada de personas consideradas como sospechosas de participar en la toma del Palacio de Justicia o colaborar con el M-19', se lee en la información de la sentencia, de 212 páginas y fechada el 14 de noviembre de 2014.

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'Los sospechosos eran separados de los demás rehenes, conducidos a instituciones militares, en algunos casos torturados y/o desaparecidos', añade el documento.

Concretamente, la CIDH halló responsable al Estado colombiano por 'las desapariciones forzadas' de siete empleados de la cafetería del Palacio: Carlos Rodríguez, Cristina Guarín, David Suspes, Bernardo Beltrán, Héctor Beltrán, Gloria Lizarazo y Luz Portela.

También de las dos visitantes, Lucy Oviedo y Gloria Anzola, y de la guerrillera del M-19, Irma Franco.

También es culpable la fuerza pública de la época de 'la desaparición forzada y posterior ejecución extrajudicial' del magistrado auxiliar Carlos Urán.