El alcalde de Barranquilla, Alejandro Char, llegó hasta la casa del auxiliar bachiller de la Policía, Marc Jordi Miranda Carrillo, asesinado la mañana del lunes en el barrio Santo Domingo por dos delincuentes en moto, y le prometió a Ana Carrillo, madre del joven de 21 años, que su muerte 'no quedará impune'.
El primer mandatario de los barranquilleros arribó al lugar acompañado del general Mariano Botero Coy, comandante de la Policía Metropolitana.
El alcalde se mostró visiblemente afectado por el atentado que acabó con la vida del joven bachiller.
'Estamos muy dolidos y con el corazón partido porque era un bebé de 21 años que decide escoger la profesión de policía para salvar al resto de los colombianos, un bebé como ese se lo lleva el destino', dijo el primer mandatario.
El alcalde reiteró que no dejará que el homicidio del joven auxiliar bachiller de la Policía quede impune y al respecto señaló que las investigaciones van por buen camino.
'Tengo mucha confianza en el general Botero y en todo su equipo de hombres, y en esta ocasión no será diferente, confío en que esos bandidos saldrán a flote y tendrán su merecido porque hechos como estos arrugan el corazón de los colombianos', dijo Char.
Finalmente el funcionario señaló que la próxima semana visitará a la familia de Marc Jordi, a la que dijo que acompañará en su proceso.
