La Policía Nacional incautó 31,2 toneladas de ácido sulfúrico que eran transportadas en un camión cisterna en la vía que sale al puerto de Barranquilla, capturando también al conductor.
Las autoridades determinaron que el químico pretendía ser llevado hasta el departamento de Norte de Santander, donde la organización criminal de ‘los Puntilleros’ esperaba la sustancia para movilizarla por trochas en pequeñas cantidades hasta los cristalizaderos.
Los controles permanentes en las vías del área metropolitana de Barranquilla habían impedido el tránsito del tractocamión, y la Policía estableció que en varias oportunidades el conductor intentó salir del parqueadero donde se ubicaba, pero la presencia de los uniformados se lo impedía.
'La recomendación de los cabecillas al conductor fue iniciar el desplazamiento horas antes del encuentro de fútbol entre Colombia y Bolivia, puesto que creían que las autoridades estarían ocupadas en el control y la seguridad del estadio Metropolitano', manifestó la Policía.
La sustancia se dejó a disposición de las autoridades para una destrucción controlada, además los investigadores determinaron que el costo de estas sustancias alcanza un precio ilícito de 403 millones de pesos.
En Barranquilla se pueden conseguir las sustancias químicas controladas, y son comercializadas para usos industriales, en la fabricación de pinturas, detergentes, disolventes y otros; los narcos acopian varias compras en bodegas hasta tener una buena cantidad y así movilizarla hasta los laboratorios de producción de alcaloides.