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Como resultado de una investigación que se inició el 22 de enero, día en que la joven Jasmín Álvarez Romero fue hallada con signos de violencia en una trocha de Pontezuela, Cartagena, fue capturado la tarde del jueves el presunto agresor: el taxista Meruán Wong Fuentes.

La directora de la Fiscalía seccional Bolívar, Ibeth Hernández Sampayo, dio a conocer el detenido es investigado por feminicidio agravado en grado de tentativa, acceso carnal violento y secuestro simple.

Investigadores de la Policía capturaron a Wong en un operativo desplegado en el barrio El Prado, cerca del mercado de Bazurto. Lo sorprendieron cuando caminaba desprevenido, vestido con un buzo azul turquí y una gorra de cubierta ancha.

Según las pesquisas Wong conducía el taxi, de placas SPH-319, que recogió a las 3:41 de la madrugada a Álvarez a las afueras de una discoteca, en la Avenida del Consulado, detrás de La Castellana.

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Álvarez, estudiante de salud ocupacional de 24 años, desapareció desde ese momento y fue encontrada cerca de siete horas después en la zona norte de Cartagena. Un mototaxista se percató de que agonizaba tendida en una zona enmontada, donde había sido abandonada.

En la investigación participaron tres fiscales especializados, apoyados por agentes de la Sijín de Cartagena.

¿Una mujer?

Wong Fuentes había sido entrevistado por las autoridades el mismo 22 de enero, pero luego de que expusiera su versión no fue detenido.

Según reportaron las autoridades, el taxista manifestó que recogió a Jasmín y la dejó 'cerca del CAI de Policía del barrio Crespo'.

Pese a su versión, el juzgado 4to. penal municipal de Cartagena emitió la orden de captura contra el sospechoso, tras casi un mes de investigación.

En la audiencia de legalización de captura, imputación de cargos y solicitud de medida de aseguramiento, que se extendió hasta las 7 de la noche, el mismo juzgado dispuso la reclusión de Wong Fuentes en la Cárcel de Ternera. El detenido no aceptó los tres cargos que la Fiscalía le formuló.

Javier Méndez, tío de Jasmín Álvarez Romero, dijo a EL HERALDO que su sobrina fue dada de alta el viernes pasado contra todo pronóstico médico inicial. Permaneció en la unidad de cuidados intensivos de la Clínica San José de Torices.

Méndez reveló que las autoridades investigan la participación de una mujer en el ataque. 'Aún en estado de conmoción, Jasmín dijo haber visto a una mujer en la escena, pero se busca establecer si fue un hecho real o producto de la confusión que tenía'.

Sin caminar

Aunque recibió el alta médico, Álvarez no puede caminar debido a las secuelas del ataque.

'Día tras día va mejorando. Había situaciones que nos preocupaban, como posibles daños neurológicos que, parece, van superándose', contó Méndez. 'Todavía no camina, está aprendiendo; ya habla, no fluidamente, pero se expresa'. La víctima, sin embargo, no ha podido entregar su testimonio a la Fiscalía porque no se encuentra en condiciones de rendir una declaración penal.

'Intenta recordar lo ocurrido, mas el trauma que sufrió no deja que se exprese totalmente. Ayer (jueves) tuvimos un diálogo con ella en el cual nos comentó algunas cosas, pero todavía falta mucho', explicó Méndez.